Tribunales
Dos de las víctimas del fotógrafo acusado de aprovecharse de 41 menores afirman que también fotografió sus vaginas
Las menores, que querían ser modelos, tenían 15 y 16 años cuando ocurrieron los hechos
Dos de las víctimas del fotógrafo acusado de aprovecharse de 41 menores que querían ser modelos han relatado este martes al tribunal que les tomó imágenes en las que solo se veían sus vaginas y una ha detallado que le dijo que la tenía «súper rosita y súper bonita, no como las prostitutas».
En la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia de Las Palmas contra Luis Jorge M. E., de 55 años, que fue director de una agencia de modelos llamada «Moodels Canarias» y se enfrenta a 187 años de prisión, han declarado este miércoles otras ocho denunciantes del caso, sus progenitores y la abuela de una de ellas -encargada de su tutela-, y todas han manifestado que les hacía posar de forma provocativa.
Las dos menores que han afirmado que les fotografió sus genitales han declarado tras un biombo a petición de ambas para evitar la confrontación visual con el acusado; una ha indicado que tenía 16 años cuando ocurrieron los hechos y la otra no recordaba si 15 o 16.
La primera de esas dos testigos ha explicado que fue «todo un proceso» hasta que llegó a posar sin ropa y que, en la última de las seis o siete sesiones a las que asistió, fue cuando el procesado le fotografió la vagina y le hizo los comentarios sobre su aspecto.
Ha señalado que para lograr que se quitara la ropa, Luis Jorge M.E. argumentaba que era necesario si quería "soltarse como modelo" y le mostró fotos de otras chicas desnudas.
El procesado le decía también que se imaginara que la cámara era un chico que le gustaba, recurso que empleó con otra de las denunciantes a la que le indicó que pensara que «estaba follando con Mario Casas», según ha manifestado al tribunal.
La otra joven que asegura que le hizo fotos de la vagina ha explicado que fue el acusado quien contactó con ella a través de Instagram, que le dijo que no era fácil entrar en su agencia y que estaba interesado en fotografiarla.
Esta testigo ha narrado que la primera vez que fue al estudio del procesado en un garaje del barrio de El Batán de Las Palmas de Gran Canaria la recogió en su casa y le advirtió de que su madre no podía estar presente. También ha contado que fueron cuatro las sesiones a las que asistió, la primera con ropa y el resto ya desnuda.
Según ha relatado, le mostró fotos de chicas desnudas para que no tuviera vergüenza.
En unas ocasiones posó sola y en otras acompañada, incluso con amigas, y para tomar la imagen de la vagina le hizo ponerse a cuatro patas, ha explicado al tribunal.
En la sesión de este miércoles, otra de las jóvenes que tenía aspiraciones de ser modelo y que posó para el acusado, ha declarado que le dijo que «tenía que ser atrevida» y también le enseñó fotos de chicas desnudas.
Tras retratarla sin ropa y encima de una cama junto a otras dos menores, le aseguró que esas imágenes las iba a borrar y le advirtió que no podía contar lo sucedido y que, si lo hacía, «la echaba de la agencia».
Así mismo, ha indicado que lo comentó con una amiga y que él se enteró le «echó la bronca». «Como castigo me dijo que no llevara ropa en la siguiente sesión», ha afirmado la joven.
Las denunciantes que han declarado este miércoles han dicho, al igual que las que lo hicieron en la primera sesión, que el acusado les prometió que las fotos en las que aparecían desnudas se las daría cuando cumplieran 18 años.