Un grupo de expertos ve necesario avanzar en la vacunación de los 12 a los 17 para acercarse a la inmunidad de rebaño
El GCMSC plantea potenciar la vaccinia en adolescentes como nueva estrategia para controlar la epidemia
Objetivo: cobertura del 85%
Los expertos, entre los cuales hay reconocidos epidemiólogos y virólogos, anticipan que seguir aumentando la cobertura vacunal hasta el 85% será «un desafío sin precedentes» porque en algunos grupos de edad que ya se pueden vacunar sigue habiendo personas que no lo han hecho y que son «presumiblemente las reticentes o de difícil acceso».
Por eso, creen que hay que adoptar nuevas estrategias y defienden avanzar en la vacunación de los más jóvenes. Además, creen que la quinta ola ha evidenciado que los adolescentes (12-18 años) y los adultos jóvenes (19-29 años) han estado los grandes impulsores de la propagación del virus en las últimas semanas, con una incidencia acumulada a 14 días que a menudo ha triplicado la de cualquier otro grupo de edad, y con el grupo de edad 10-29 años representando aproximadamente la mitad de los casos totales.
Por otra parte, los acontecimientos de las últimas semanas han demostrado que un porcentaje pequeño (~1%) de los jóvenes que se infectan requieren hospitalización, y que hasta un 10-15% de las personas infectadas podrían tener manifestaciones persistentes del síndrome covid tabla aguda.
«En el contexto actual, la vacunación de los más jóvenes, y en particular de los adolescentes, podría contribuir a mejorar la protección comunitaria conferida por las vacunas, contribuyendo así a los esfuerzos por alcanzar la tan deseada inmunidad de grupo».
Además, apuntan que vacunar a los adolescentes permitiría una
tornanda a la escolaridad presencial sin la necesidad de mantener unas medidas de prevención tan estrictas como las implementadas durante el curso pasado.
Nuevo modelo matemático
En colaboración con expertos en modelización de la UPC, el grupo ha desarrollado un modelo matemático que permite evaluar la importancia relativa de la cobertura vacunal por grupo de edad para alcanzar el control epidemiológico de la pandemia y disminuir el riesgo de transmisión futura o la posible carga hospitalaria y mortalidad derivadas de la transmisión.
Uno de los resultados de este análisis es que la respuesta de si hay que vacunar la población joven y/o a los niños depende en gran medida del nivel de vacunación de que se alcance en los adultos y varía en función de sí se quiere reducir el impacto de la transmisión, de los casos graves o de la mortalidad.
Por ejemplo, en el caso de la mortalidad, si el nivel de vacunación de la población adulta no superara el 70% y se tuviera una R0,ef de 3, habría que vacunar aproximadamente la mitad de la población de 12 a 17 años. Si se alcanzara un 80% de cobertura en población adulta, no habría que vacunar a los menores de 17 años (mientras se mantuviera esta R0,ef de 3).
La vacunación de los más pequeños
Los investigadores también concluyen según sus modelos que la necesidad de vacunar la población pediátrica dependerá del nivel de vacunación en la población adulta y la tasa de transmisión del virus en un momento determinado.
Por ejemplo, indican que es «muy probable que con una vacunación adecuada en adultos y en adolescentes, la vacunación sistemática de niños menores de 12 años no sea necesaria para llegar al control funcional». Sin embargo, añaden que la vacunación en esta franja de edad también se podría ofrecer de manera voluntaria a los padres y madres que podrán decidir si administrarla a sus hijos o no.
Por ahora, con las simulaciones realizadas y en el contexto actual a agosto de 2021, el grupo multidisciplinar ve necesario población pediátrica de más edad (12-17 años). En este sentido, se recomienda iniciar la vacunación cuanto antes mejor, y aprovechar la plataforma de las escuelas e institutos para administrar las vacunas y completar la vacunación de esta franja de edad.
Grupo multidisciplinar
El comunicado lo firman Quique Bassat, Julià Blanco, Adelaida Sarukhan, Magda Campins, Robert Guerri, Carles Brotons, Juana Díez, Mireia Sans, Josep M Miró y Silvia de Sanjosé. La modelización matemática se ha hecho en colaboración con Clara Prats y Martí Català.