Así afecta dormir poco con la aparición del Alzhéimer

Muchos aspectos del alzhéimer continúan siendo un misterio, pero el gran volumen de investigación que se dedica a ello nos acerca más a comprenderlos cada día. Por ejemplo, se está avanzando mucho en el conocimiento de las causas de la enfermedad.

Así, un grupo de investigadores del Instituto Politécnico de Nueva York ha encontrado un posible mecanismo que relaciona las placas de beta-amiloide, un cuerpo característico que se encuentra en los cerebros de las personas con alzhéimer, con la falta de sueño.

Lo que concluyen estos autores en un trabajo publicado en el medio PLoS Genetics es, básicamente, que las interrupciones en el sueño podrían interferir en el mecanismo de nuestro sistema inmune para eliminar las placas de beta-amiloide en el cerebro.

Más concretamente, señalan que estas placas podrían, en condiciones normales, ser destruidas por los macrófagos, células de nuestro sistema inmune encargadas de eliminar material extraño en el cuerpo, siguiendo los ritmos circadianos (en esencia, el ritmo de la alternancia entre sueño y vigilia).

Para comprobar si esto es así, extrajeron macrófagos de la médula ósea de ratones, y los alimentaron con placas de beta-amiloide (marcadas con tintes fluorescentes) a diferentes horas del día. En función de las placas que consumían, pudieron elaborar un 'mapa' de los ritmos circadianos de los macrófagos.

Incluso, el equipo de científicos identificó una clase de proteínas controladas por el ritmo circadiano, llamadas sulfatos de heparano, que creen que podrían señalar a los macrófagos cuándo eliminar las placas de beta-amiloide.

Los autores opinan que entender los mecanismos y los tiempos del proceso de eliminación de las placas por parte de los macrófagos podría conducirnos a nuevos tratamientos para algunos de los síntomas de la enfermedad de alzhéimer. La acumulación de placas de beta-amiloide oscila en los cerebros sanos, pero esta oscilación podría detenerse cuando somos más mayores, resultando en la acumulación de más placas. Por ello, creen que puede ser posible lograr impulsar esta oscilación en los enfermos de alzhéimer.

Causa o síntoma

No obstante, todavía falta mucho por comprender a este respecto. Por ejemplo, una cuestión controvertida entre los investigadores es si las placas de beta-amiloide constituyen una causa o un síntoma de la enfermedad de Alzheimer.

De hecho, algunos tratamientos que logran eliminar estas placas no han podido acabar con el resto de los síntomas de la enfermedad. Aún así, estos investigadores creen que el descubrimiento podría tener implicaciones en cualquier caso, ya que los macrófagos también eliminan otros elementos que se han relacionado con el desarrollo de la enfermedad, como son las fibras torcidas de proteínas tau.

Además, sea cual sea el rol preciso que el beta-amiloide cumple en la enfermedad, lo cierto es que la formación de placas es un claro factor de riesgo de la enfermedad de alzhéimer.

Finalmente, los autores concluyen señalando que estos hallazgos subrayan la importancia de mantener unos ritmos circadianos consistentes, así como el riesgo amplificado que podrían correr quienes desempeñan determinadas profesiones y turnos de trabajo.