Política
Casado se despide del Congreso de los Diputados
Sánchez promete que no adelantará las elecciones para aprovechar la «debilidad» del PP
El todavía presidente del PP, Pablo Casado, ha protagonizado este miércoles la que previsiblemente será su última sesión de control al frente de su partido. Casado ha asistido al Hemiciclo acompañado de la vicepresidenta de la cámara, Ana Pastor, aunque esta y la dirección del grupo le habían pedido la renuncia pocas horas antes. Ha pronunciado un discurso donde ha apelado a la «reconciliación» y la capacidad de superar «enemistades y fracturas» de la transición, y ha reivindicado «el espacio de la centralidad». El grupo del PP ha aplaudido derecho su intervención. «Espero que el gobierno se ponga al servicio del interés general con con respecto a las instituciones, a la unidad nacional y de la igualdad entre españoles,» ha dicho.
«No lo haremos porque por mucho que se han empeñado en lo contrario, este es un gobierno con sentido de Estado que priorizará los intereses generales», ha dicho. Por lo tanto, según Sánchez, «las elecciones se convocarán cuando corresponda, y competiremos en base a nuestros méritos, y no en base a las debilidades de nuestros adversarios, porque así es como entendemos el patriotismo democrático».
En acabar esta respuesta, y sin aprovechar el segundo turno de palabra habitual a la sesión de control, Casado ha bajado los peldaños de su escaño y ha
ensartado la salida sin decir nada y para sorpresa de su propio grupo parlamentario. No ha hecho manifestaciones a la salida.
Aplausos del grupo parlamentario
Después de la pregunta de Casado formulada a Sánchez, los miembros del grupo parlamentario del PP han aplaudido derechos la intervención del todavía líder del partido. Entre los diputados que han aplaudido, hay los firmantes del comunicado crítico de ayer el martes que pidió la destitución del exsecretario general del PP, Teodoro García Egeo, y la convocatoria de un congreso extraordinario.
Máxima expectación a la llegada
La llegada de Casado al Congreso ha sido rodeada de una gran expectación. El todavía líder del PP no ha respondido las preguntas de los periodistas en los pasillos y ha entrado en el hemiciclo acompañado de la portavoz del grupo parlamentario, Cuca Gamarra, y de la vicepresidenta segunda de la cámara baja, Ana Pastor, entre otros miembros del PP.
Fuentes de Génova han explicado la decisión de Casado de asistir a la sesión de control a pesar de la crisis interna del partido por «obligación como cabeza|cabo|jefe de la oposición y con respecto a la sede de la soberanía nacional». «A la altura de las circunstancias, aunque el contexto sea difícil», han remarcado.
Casado se quedó solo este martes, pero intenta ganar tiempo. Por la tarde se dio a conocer la dimisión de suyo número dos, el secretario general del PP, Teodoro García Egeo, y la convocatoria de la Junta Directiva Nacional para el martes con el objetivo de convocar el congreso extraordinario.
Casado cedía de esta manera a dos de las peticiones que le hacen los barones, pero no adoptaba «la última decisión» de que le pedía el presidente de la Xunta de Galicia, a Alberto Núñez Feijóo, en forma de renuncia.
El presidente del PP ha convocado esta noche (a las 20h) a todos los presidentes regionales del PP. Una fórmula para reunirse con los barones sin que esté presente Isabel Díaz Ayuso, que a diferencia de Feijóo, Moreno Bonilla o Mañueco, no es presidenta del PP de Madrid.
Los barones ya han adelantado que le pedirán la dimisión. De momento, Casado mantiene su intención de continuar al frente del partido como mínimo hasta la reunión de la Junta Directiva del martes. Sin aliados ni escudero, habrá que ver si es capaz de conseguirlo.