Judicial
Los psicólogos consideran creíble el relato de una menor que detalla abusos y violaciones del padre en Lleida
El hombre, que se enfrenta a 10 años de prisión, niega los hechos y considera que la hija miente influenciada por la madre
Los psicólogos del Equipo de Atención a la Víctima (EATAV) consideran «creíble» el relato de una niña de 11 años que los explicó tocamientos, abusos sexuales y violaciones que sufrió en casa por parte de su padre durante un año y medio -entre 2018 y 2019-, en Lleida. Durante el juicio celebrado este miércoles en la Audiencia, los psicólogos han destacado que el relato de la menor es compatible con un abuso sexual intrafamiliar y que es «muy rico, con detalles y expresa sentimientos». Al final del juicio se ha podido escuchar la declaración grabada que la menor hizo delante de los psicólogos, de una hora y media, en que da detalles de los hechos. El acusado, que se enfrenta a 10 años de prisión, dice que la hija miente influenciada por la madre y las tías.
De entre las agresiones sufridas por la niña, el padre le practicaba sexo oral, ha explicado la menor con sus palabras, y después el hombre le decía que «no tenía que dejar que ningún otro chico le hiciera eso», ha relatado. «La primera vez le dije que de acuerdo y pensaba que no pasaría más pero no fue así. Siempre pasaba lo mismo», ha asegurado la niña. «Me obligaba a quitarme la ropa y a hacer cosas que no quería», ha dicho.
La menor finalmente explicó los hechos a su tía-abuela, en Madrid, donde vivía. La niña fue a pasar dos semanas de vacaciones con la familia materna en Madrid. «Me puse muy contenta porque sabía que aquellos días estaría tranquila», ha dicho. Fue a la estación, cuando estaba a punto de coger el tren de vuelta hacia Lleida que decidió explicarle a la tía. «Me quedé en shock», asegura la mujer, que cogió un billete al día siguiente, junto con su hermana, y fueron hacia Lleida a explicarle a la madre de la menor.
En el juicio han declarado las tías, la abuela y la madre, que han coincidido en que en un encuentro en un bar, en Lleida, le preguntaron a la niña por|para los hechos y ella los dijo que el padre había hecho «cosas de mayores» con ella. A partir de este momento, la familia se dividió, la del padre creyente el acusado y la de la madre creyente la niña, y la madre cogió a la niña y se marcharon a Madrid.
Según los psicólogos, toda esta situación afectó a la niña, que «se sentía culpable por todo lo que había pasado». Preguntados por el abogado de la defensa, los psicólogos dudan de que la madre o las tías hayan podido influenciar a la niña para denunciar falsamente. Explican que no detectan ningún beneficio para ella a raíz de denunciar los abusos. «Al contrario porque pierde el contacto con su abuela –con quien más próxima se sentía- y pierde también la relación con los compañeros de escuela de Lleida a quién echa de menos», aseguran.
La Fiscalía pide que se impongan 10 años de prisión al hombre por un delito continuado de agresión sexual a menor de 16 años con los agravantes de parentesco y de violencia ya que, según la acusación, utilizaba la fuerza y la intimidación para someter a la chica. Además, el ministerio público pide que se le impongan al hombre, de nacionalidad brasileña, 8 años de libertad vigilada cuando salga de la prisión, que se le prohíba acercarse o comunicarse con la chica durante 10 años, que se le retire la custodia de la hija durante 6 años y que la indemnice con 20.000 euros por daños morales.