Guerra en Ucrania
La guerra obliga a marcharse de Ucrania a un millón de niños, muchos sin sus familias
Al trauma de abandonar su casa se añaden los peligros de sufrir violencia, explotación o abusos
Un millón de niños han huido de Ucrania en las últimas semanas y un número creciente llegan a otros países "solos y sin apoyo familiar", lo que están generando "una crisis de protección de menores", afirmó hoy la organización no gubernamental Save the children.
En un primer comunicado, la ONG había afirmado que el número de menores desplazados era de 800.000, aunque posteriormente rectificó esa cifra.
Cuando se suman ya más de dos millones de refugiados por la invasión rusa, la ONG pide a las autoridades fronterizas y organismos humanitarios que "adopten medidas para mantener a los niños con sus principales cuidadores", "brinden apoyo psicológico" e introduzcan "programas para prevenir la separación".
Estos servicios deben incluir "espacios adaptados a los niños, información adecuada para ellos, localización y reunificación con sus familias y apoyo a la salud materna", señala en un comunicado.
Save the children dice que los informes desde la frontera sugieren que algunos niños, muchos de ellos menores de 14 años, "llegan solos tras haber sido enviados por familiares que no pudieron salir de Ucrania" pero que querían que "sus hijos estuvieran a salvo" de la guerra.
Otros menores han sido separados de sus parientes "durante el caos de huir de sus hogares" y todos muestran signos de angustia y trauma psicológico, indica.
"Los padres recurren a medidas desesperadas y desgarradoras para proteger a sus hijos", como enviarlos con vecinos y amigos al extranjero mientras ellos se quedan con personas mayores o para proteger sus hogares", declara Irina Saghoyan, directora para Europa del Este de la organización.
Saghoyan advierte de que la separación puede comportar "un profundo estrés psicológico debido a la incertidumbre, el miedo por la situación de los parientes y la ansiedad por la ruptura".
Al mismo tiempo, se incrementa "el riesgo de violencia, explotación, trata de menores y abuso", avisa.
"Debe hacerse un gran esfuerzo para evitar la separación de los niños de sus cuidadores y garantizar la reunificación familiar inmediata cuando esto suceda", afirma Saghoyan.
Presente en Ucrania desde la guerra de Crimea de 2014, Save the children trabaja ahora con otras agencias para "establecer procedimientos de localización y reunificación de los niños con sus familias en Polonia y países vecinos, así como mecanismos de protección y de denuncia.