La covid-19 ha tenido un impacto «desproporcionado» en la salud mental de las personas
La OMS alerta que el suicidio sigue siendo una de las principales causas de mortalidad entre los jóvenes
La Organización Mundial de la Salud ha hecho público este jueves el Informe Europeo de Salud del 2021 donde alerta del fuerte impacto que la covid-19 ha tenido en la salud mental de los ciudadanos de la región europea de la OMS. Según recoge el informe, el suicidio sigue siendo uno de los principales factores de mortalidad prematura. A pesar de una tendencia a la baja, la región europea de la OMS todavía tiene una de las tasas de mortalidad por suicidio estandarizadas más altas del mundo. Asimismo, la organización recoge que las mujeres de 18 a 24 años y de 35 a 44 años acarrean los peores registros con respecto al bienestar mental. Los expertos de la OMS piden a los países poner la salud «en el centro» de la recuperación por la crisis de la covid-19.
«Teniendo en cuenta los impactos de gran alcance de la pandemia de la covid-19 en la región europea de la OMS, los países se enfrentan a retos desconcertantes para abordar las desigualdades en salud y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con la salud para el 2030», advierten en el comunicado emitido desde la Organización Mundial de la Salud.
El informe recoge que durante los primeros meses de la pandemia el 40% de los servicios sanitarios esenciales se interrumpieron al menos parcialmente en la región europea de la OMS. Asimismo, el patrón persistió en el 2021, con un 29% de los servicios sanitarios parcialmente interrumpidos durante los tres primeros meses del año.
En este sentido, el director regional de la OMS en Europa, Hans Henri P. Kluge, expresa que hay que priorizar el sector de la salud «como nunca antes», y que hace falta hacerlo poniendo el foco en cuestiones históricamente desatendidas como la salud mental o el reconocimiento de los sistemas y trabajadores sanitarios como «pilares esenciales» de la sociedad. Según Kluge, no hacerlo significaría «socavar» la seguridad sanitaria «de países individuales y de toda región».
Por otra parte, la nueva publicación de la OMS también señala que la protección financiera sigue siendo un reto en la región europea. Los expertos hablan de gasto sanitario «catastrófico» entre la población, dado que, en función del país, entre un 1% y un 19% de los hogares no pueden hacer frente a la asistencia sanitaria a causa de los altos costes.
Entre algunos de los datos, destaca que con respecto a las enfermedades no transmisibles, a pesar de los últimos avances en la región en el abordaje de factores de riesgo como el alcohol y el consumo de tabaco, el 26% de la población adulta todavía fuma tabaco (en comparación con la media mundial del 23,6%) y los adultos beben de media 9,5 litros de líquido puro alcohol por año (en comparación con la media mundial de 5,8 litros). Asimismo, el informe recoge que actualmente 1 de cada 3 niños sufren sobrevenido u obesidad en la región europea de la OMS.
Algunos objetivos alcanzados
Entre algunos de los hitos que destaca la publicación es la tasa de mortalidad materna provocada por el parto. Uno de los objetivos de los ODS era situar la cifra de mortalidad en menos de 70 por cada 100.000 partes. Según recoge el informe, en la actualidad en la región la tasa media es de 13 por cada 100.000.
Por otra parte, la tasa de mortalidad en recién nacidos y en niños de menos de 12 años también ha superado el objetivo de los ODS. De media, se registran cuatro muertes por cada 1.000 bebés nacidos vivos, y ocho muertos por cada 1.000 niños de menos de doce años. El propósito de los ODS era situar estas cifras en 12 y 25, respectivamente, por cada 1.000.
El informe también señala que la región europea de la OMS ha experimentado progresos «mixtos» con respecto a la mortalidad prematura provocada por enfermedades no transmisibles. Entre el 2010 y el 2018, la mortalidad prematura por enfermedades cardiovasculares disminuyó casi un 20%, y casi un 10% con respecto a la mortalidad prematura provocada por cánceres. Sin embargo, desde la OMS apuntan que el cáncer todavía representa más del 20% de todas las muertes, una situación «agravada todavía más» por el impacto de la pandemia en el cribado del cáncer y tratamiento.