Ciencia
Descubren una mutación que hace a sus portadores más inteligentes
Investigadores alemanes indican que esta alteración puede provocar ceguera
Muchas de las mutaciones hasta ahora catalogadas que afectan al sistema nervioso tienden a provocar problemas en su funcionamiento, que pueden ir desde síntomas leves hasta severas discapacidades. Por ello, resulta sorprendente cuando se encuentra una que, de hecho, podría mejorar el funcionamiento en un área concreta.
Esto es, sin embargo, lo que concluye una investigación llevada a cabo por dos investigadores alemanes y publicada en el medio especializado Brain. Y es que, aunque inicialmente estaban estudiando esta alteración porque provoca ceguera, se dieron cuenta de que los pacientes que la poseen marcaban más alto en algunos indicadores de inteligencia, como el coeficiente intelectual o la memoria de trabajo. Para entender por qué, decidieron emprender un trabajo sobre modelos animales.
El proyecto en cuestión consistía en la modificación genética de moscas de la fruta con la alteración genética en cuestión y después, empleando técnicas como la electrofisiología, comprobar los parámetros de las sinapsis.
Las sinapsis son, más o menos literalmente, 'puntos de contacto' en el cerebro: los puntos mediante los cuales las células nerviosas se comunican entre ellas. La razón de usar modelos animales está en que actualmente los métodos para medir su funcionamiento no pueden emplearse en humanos.
Una mejor comunicación entre neuronas
Curiosamente, lo que observaron es que las moscas con la mutación tenían, de hecho, una mejor transmisión de información en las sinapsis. Esto, que muy probablemente suceda de una manera similar en los seres humanos, no solo podría explicar el mejor desempeño en esas áreas relacionadas con la inteligencia, sino también explicar por qué quienes tienen esta mutación también sufren ceguera.
Esta mejor transmisión de información se debe a que, por efecto de la mutación, los componentes moleculares de las células nerviosas que desencadenan las sinapsis están más cerca entre sí, lo que provoca una mayor liberación de neurotransmisores.
Si bien estos resultados no son totalmente extensibles a los seres humanos, los autores subrayan que los modelos animales son considerablemente fiables. Y es que, en contra de lo que pudiéramos pensar, animales como las moscas de la fruta son en realidad bastante similares, genéticamente, a los seres humanos: se estima que el 75% de los genes que pueden causar alguna enfermedad en los seres humanos están también presentes en estos insectos.
Esto permite no sólo estudiar alteraciones que afectan al funcionamiento del sistema nervioso, sino también adquirir un conocimiento más profundo de todo tipo de enfermedades incluyendo desórdenes metabólicos como la enfermedad o incluso tumores malignos.