Policial
Un agente del CNP ha estado infiltrado durante dos años en movimientos de la izquierda independentista
El SEPC, Alerta Solidària y otros colectivos piden que se «depuren» responsabilidades de una operación «inaceptable»
Un agente del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha estado infiltrado en los últimos dos años en movimientos sociales y de la izquierda independentista, como el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC), el Casal Popular Lina Òdena y Resistim al Gòtic, según una investigación periodística que publica este martes la revista la Directa. El agente obtuvo una identidad falsa, la de Marc Hernàndez Pon, a finales del 2019 y en junio del 2020 empezó a participar en protestas de los colectivos, de los cuales ha formado parte hasta el mayo pasado. Alerta Solidària, el SEPC, la CUP y otros colectivos denuncian que infiltrar policías en organizaciones políticas es «inaceptable» en un estado democrático y piden que se «depuren» responsabilidades.
Según publica la Directa, unos meses antes de empezar a participar en acciones de los colectivos por el derecho a la vivienda y de la izquierda independentista el que sería agente del CNP había creado una identidad digital a través de cuentas en las redes sociales, que en las últimas horas se han cerrado. Durante estos dos años, ha estado participando en asambleas y protestas y en mayo formó parte de la acción de presentación del colectivo Batec, que promueve no pagar en Rodalies para denunciar el déficit del servicio.
La última asamblea en la que participó fue a mediados de mayo y poco después empezó a enviar evasivas a los grupos de Telegram de los cuales formaba parte. En los entornos donde se ha estado moviendo estos meses, no saben si todavía está en Barcelona, según informa este medio.
En un comunicado este martes después de la publicación de la Directa, Alerta Solidària ha denunciado, junto con las organizaciones SEPC, Arran, COS, la CUP y Endavant, que se han vulnerado derechos fundamentales con la infiltración de un policía en organizaciones políticas y movimientos sociales que trabajan de manera asamblearia. Las organizaciones enmarcan la infiltración en la operación de estado contra el independentismo de base» y alertan de que es una «intromisión en la actividad lícita» de estos movimientos para «controlarla».
Según explican en el comunicado, los protocolos de seguridad «han funcionado» y se han cortado todos los vínculos con «el topo» de manera inmediata desde que se ha conocido la falsa identidad. En una rueda de prensa, el SEPC y Alerta Solidària han explicado que están estudiando las opciones legales que tienen, aunque, han dicho, confían «poco» en la justicia. Exigen que «se depuren las responsabilidades personales y políticas de aquellos que han autorizado o han permitido que se infiltren agentes en los movimientos políticos».