Investigadores del Hospital Vall d'Hebron han comprobado en modelos animales que la activación de genes y los procesos moleculares son diferentes entre sexos en los casos de daño renal agudo, lo que explicaría por qué esta enfermedad es habitualmente más severa en hombres.
La lesión renal aguda se caracteriza por un descenso rápido de la función del riñón con una alta tasa de mortalidad y progresión hacia la enfermedad renal terminal que requiere diálisis y trasplante.
La isquemia o falta de sangre es la causa más frecuente de este tipo de lesión, que muestra diferencias por sexo: por cada dos mujeres, hay tres hombres que progresan hacia enfermedad renal crónica y terminal.
Además, estudios clínicos han demostrado que los varones tienen el doble de mortalidad que las mujeres.
Para entender cuáles son los procesos moleculares de este tipo de daño y las diferencias entre sexos, el grupo de Fisiopatología Renal del Vall d'Hebron Instituto de Investigación (VHIR) ha liderado un estudio para analizar los marcadores bioquímicos, lesiones de tejido y cambios moleculares que se producen en este proceso, una investigación cuyos resultados publica este miércoles la revista Scientific Reports.
Los investigadores han generado un modelo de cerdos hembras y machos con daño renal por isquemia/reperfusión (falta de sangre y posterior restablecimiento del flujo) y regeneración del órgano para estudiar las diferencias entre sexos en la activación de genes y procesos moleculares.
Si bien los resultados del trabajo no mostraron diferencias entre ambos sexos en los niveles de dos marcadores de función renal (nitrógeno ureico en sangre y creatitina sérica), sí que se observó que las hembras presentaban infiltrados de células del sistema inmunitario más altos en estado basal -previo al inicio de la enfermedad- y durante la regeneración, mientras que los machos mostraban más daño en los túbulos renales por la lesión.
Los análisis de las biopsias renales revelaron diferencias entre los momentos de la lesión y reparación renal en cada sexo y también entre machos y hembras en el mismo punto de estudio en relación a la regulación de genes.
Según la jefa del grupo de Fisiopatología Renal del VHIR, Anna Meseguer, «algunos de estos cambios, que se confirmaron posteriormente en muestras humanas, parecen estar relacionados con la producción de hormonas sexuales masculinas», que jugarían así un papel relevante en la evolución de la enfermedad.
En general, este estudio constituye una caracterización extensa de las diferencias en la expresión génica en los diferentes momentos del proceso de isquemia/reperfusión del riñón y la posterior regeneración y entre los dos sexos.
«Los resultados ofrecen datos con gran valor traslacional que podrían ayudar a diseñar estrategias específicas para promover la regeneración renal en función del sexo», ha destacado por su parte el primer autor del estudio, Stéphane Nemours.