Sociedad
Proponen hablar del suicidio a escuelas para avanzar en su prevención
El presidente de la Fundación para la Prevención del Suicidio defiende que hay que gastar el tabú tal como se ha hecho en otras cuestiones como la violencia machista o las drogas
Al igual que en un tiempo era tabú hablar de sexo o de drogas en los centros educativos, llegará un momento en el que la actitud suicida y la autolesión se «integrará en la actividad normal» de las escuelas como una medida para su prevención.
Así lo mantiene en una entrevista con EFE el presidente de Fundación Española para la Prevención del Suicidio, Andoni Anseán, que este próximo miércoles participará en Vitoria en una jornada sobre la prevención del suicidio organizada por Grupo5.
Anseán sostiene que para avanzar en la prevención del suicidio hay que tomar muchas medidas estructurales y recuerda que la conducta suicida « es muy sensible a las características del entorno social y, sobretodo, cultural».
«La conducta suicida tiene muchísimo componente social y es muy sensible a los cambios, se puede modificar» y aquí entra la educación y el trabajo de los medios de comunicación, por ejemplo.
Sostiene que « perfectamente se puede hablar en las escuelas del suicidio», al igual que ahora se hace con otros temas, como la violencia machista, cuando históricamente no se habló de ellos « en los colegios, en las barras de los bares ni en las casas».
En cuanto a los medios de comunicación, ha recordado que la Organización Mundial de la Salud sostiene que una información adecuadamente enfocada, basada en un horizonte de salud pública y no en los casos particulares que pueden « alimentar el morbo y el amarillismo», puede tener un «efecto preventivo de primer orden».
«Con el suicidio ocurrirá como ocurrió con otros problemas, como la violencia de género, que décadas y muchas medidas después, tanto de prevención como de intervención, se llegará a una situación totalmente distinta» a la actual, señala.
Anseán insiste en que el problema del suicidio hay que abordarlo desde «todas sus perspectivas», porque no se va a solucionar «con una llamada de teléfono, con una consulta de 5 minutos en la Atención Primaria o media hora en Salud Mental».
Cita la importancia de «separar de una vez por todas» que las conductas suicidas « pueden explicarse desde la existencia o no de un trastorno mental», porque es un fenómeno que «va mucho más allá de lo sanitario».
«Hay que desmitificar la idea de que las personas con conductas suicidas son personas que sufren un trastorno mental y que eso lo explica», porque se puede hacer la lectura inversa: «yo no tengo un trastorno mental, por lo que no existe riesgo, hasta que pasa».
El presidente de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio reafirma que las personas que se quitan la vida o que tienen ideas suicidas «fundamentalmente tienen problemas», son personas como todas las demás que están en una situación de «sufrimiento y, sobretodo, de desesperanza de que ese sufrimiento vaya a desaparecer a medio o largo plazo y que, por ello, la única salida es quitarse la vida».
«Hay que ayudarles a que puedan solucionar esos problemas de manera diferente a quitarse la vida: ese es el reto que tienen los profesionales y todos los miembros de la sociedad, como agentes de prevención que somos todos», añade.
Anseán, con una ponencia sobre las estrategias autonómicas de prevención del suicidio, participará el próximo miércoles en Vioria en la jornada «Hablemos: Hacia la prevención del suicidio», organizada por Grupo5, y en la que, además, tomarán parte, entre otros expertos, Dolors López, autora del libro «Te nombro», y el divulgador especializado Gabriel González.