Consiguen tratar un cáncer de colon utilizando un virus vegetal
El experimento consiguió eliminar todos los tumores en ratones
Más allá de las tradicionales quimioterapia y radioterapia, la investigación en tratamientos contra el cáncer está transitando derroteros cada vez más innovadores, como son la inmunoterapia, la medicina de precisión o la terapia génica.
Ahora, un estudio realizado por la Universidad de California (Estados Unidos) ha encontrado potencial en un elemento que suena contradictorio, casi a ciencia ficción: un virus de las plantas.
Tal y como publican en el medio científico Nano Letters, este virus vegetal, llamado virus del mosaico del caupí, se emplearía en combinación con un anticuerpo llamado anti-4-1BB. En este contexto, el primero aumenta la eficacia del último sin hacer ningún daño al paciente.
Así lo han concluido tras probar la terapia de combinación en modelos animales (ratones) con cáncer de colon. En estos sujetos experimentales, el virus atraía a las células inmunes del propio huésped hacia el tumor, mientras que el anticuerpo lograba sortear la inmunosupresión que genera el propio cáncer y que, en condiciones normales, le permite sortear la respuesta inmune del organismo.
De esta forma, el enfoque logró eliminar todos los tumores y evitar su recurrencia, con una supervivencia del 100%. En otros modelos con melanoma en lugar de cáncer de colon, la terapia combinada también mejoró la supervivencia.
Recordando en todo momento que se trata de un experimento llevado a cabo sobre ratones y que por ello el método no tendría que ser necesariamente el mismo en seres humanos, la administración de los agentes terapéuticos se realizó mediante dos inyecciones semanales del anticuerpo y una semanal del virus, todas ellas en la cavidad abdominal.
Cabe señalar también que los investigadores probaron el potencial terapéutico del virus por sí solo, y efectivamente lograba resultados, aunque no tan destacables como la combinación de las dos terapias.
Una de las cosas que destacan los autores del trabajo es que el cuerpo de los ratones adquiría memoria inmunológica tras el tratamiento, y si se implantaban nuevas células cancerígenas era capaz de atacarlas por sí mismo.
Por lo prometedor de los resultados, el equipo planea seguir investigando esta dirección, clarificando entre otras cosas frente a qué tipos de cáncer podría resultar efectivo y si el enfoque podría emplearse como una vacuna frente a esos tumores.