Detectan el primer caso de un perro contagiado de viruela del mono
El galgo dio positivo doce días después de que sus dueños contrajeran la enfermedad en Francia y durmieran juntos
Investigadores han descrito el primer caso de canino contagiado por viruela del mono días después de que sus dueños cayeran enfermos.El Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECD) contemplaba el riesgo potencial de que el virus se transmitiera de personas a animales. El caso se ha publicado en la prestigiosa revista médica The Lancet.
Según explican los investigadores, dos hombres, de 44 y 27 años, asistieron al Hospital Pitié-Salpêtrière, en París (Francia), el 10 de junio de 2022. Ambos habían presentado ulceración anal 6 días después de tener relaciones sexuales con otras parejas. La pareja francesa reportó síntomas que incluían lesiones, fiebre y dolores de cabeza.
Doce días más tarde, su galgo italiano de 4 años desarrolló lesiones similares y finalmente dio positivo por viruela del mono. Los investigadores apuntan que este se habría contagiado ya que dormía junto a sus dueños.
Señala el informe que el virus que infectó a uno de los pacientes y el virus que infectó al perro mostraron una homología de secuencia del 100% en los 19,5 pares de kilobases secuenciados.
«Nuestros hallazgos deberían impulsar el debate sobre la necesidad de aislar a las mascotas de las personas positivas al virus de la viruela del mono. Las mascotas que tuvieron contacto cercano con una persona sintomática con viruela del mono deben permanecer en casa y alejadas de otros animales y personas durante 21 días después del contacto más reciente», exhortan los autores del estudio.
Hasta ahora, en los países endémicos, solo se había encontrado animales salvajes (roedores y primates) portadores del virus de la viruela del mono. En EE.UU. se había descrito la transmisión de la enfermedad en perros de las praderas y en Europa en primates en cautiverio que estuvieron en contacto con animales infectados importados. Pero nunca, subrayan los investigadores, se había informado de una infección entre animales domésticos, como perros y gatos.
Los veterinarios señalan que «las lesiones, generalmente, empiezan en la zona de la cabeza y, después, se extienden al resto del cuerpo, especialmente en las patas y en las orejas. Primero se inflaman y, más tarde, aparecen cubiertas por costras», hasta que las heridas desaparecen.