La división de las dosis de la vacuna de la viruela del mono permitirá llegar a unas 10.000 personas
Cabezas explica que a pesar de no ser una enfermedad «frecuente», se comporta de una forma «diferente» a cómo lo hacía hasta ahora
El Departament de Salut espera que la división en cinco de cada dosis de la vacuna de la viruela del mono les permita llegar a unas 10.000 personas en Cataluña. La secretaria de Salut Pública, Carmen Cabezas, ha explicado en una entrevista enEl Matí de Catalunya Ràdio que se están administrando las vacunas «de manera intradérmica», un hecho que «no es habitual», pero que les permite «poner entre 4 y 5 veces más el número de dosis que tienen». Cabezas también ha apuntado que a pesar de no ser una enfermedad «frecuente», han detectado que la viruela del mono se comporta de una forma «diferente» a cómo lo hacía hasta ahora. «Por eso es una emergencia internacional de salud pública», ha añadido.
Preguntada por la dificultad de llegada de las vacunas, Cabezas ha señalado que se debe a su fabricación en una compañía danesa. «Se trata de una vacuna de virus vivo modificada que se fabrica sólo en un lugar a una velocidad que no es la misma que hemos visto en vacunas como las de la covid», ha añadido. En Cataluña han llegado dos remesas, una primera de 1.600 dosis y una segunda de 2.100.
Con respecto a los criterios, se pone especial atención en aquellas personas que se encuentran en un colectivo de riesgo – embarazadas, niños o bien pacientes con inmunosupresión – que puedan haber sido contacto estrecho por convivencia. Las vacunas previas a la exposición, por el contrario, se administran a personas que tengan un alto riesgo de contraer la enfermedad, «personas con muchos contactos sexuales diversos o que tengan sexo en grupo, por ejemplo», ha especificado Cabezas.
«No hemos dejado atrás la covid»
Sobre el virus de la covid, la secretaria de Salut Pública ha recordado que «no se ha dejado atrás» y que a pesar de la afectación sea muy menor, es importante «seguir con las medidas de precaución». En este sentido, ha subrayado que será importante que la gente que se tenga que poner la segunda dosis de recuerdo en otoño, se vaya a vacunar. «Se ha aprobado para las personas a partir de los 60 años y aquellas que se encuentren en condiciones de riesgo por complicaciones», ha añadido.
En cuanto al uso de la mascarilla en el transporte público, Cabezas ha defendido que sigue teniendo sentido llevarla, ya que a pesar de los sistemas de ventilación, llega un momento que hay muchas personas de muchos grupos diferentes. «Es un entorno con unas condiciones muy determinadas donde se puede transmitir el virus», ha dicho, «no nos cuesta nada, ya que la hemos eliminado en muchos otros entornos».