Fiscalidad
Habrá beneficios fiscales para rentas bajas y pymes y aumentará la presión sobre grandes fortunas y empresas
El ejecutivo español amplía a los 21.000 euros la reducción fiscal por rentas del trabajo y crea un impuesto a los grandes patrimonios
El gobierno español anuncia un plan para rebajar impuestos y al mismo tiempo, incrementar la presión fiscal a los grandes patrimonios que recaudará potencialmente 3.144 millones de euros en el 2023 y en el 2024, según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. El paquete incluye la creación de un «impuesto de solidaridad» que pagarán las fortunas de más 3 millones de euros, que espera recaudar 1.500 millones. También se opta por rebajar el mínimo de tributación de IRPF de 14.000 a 15.000 euros y ampliar los beneficios fiscales para las rentas de hasta 21.000 euros. Con respecto a las empresas, se reduce del 25% al 23% el impuesto de sociedades para las pymes y, en cambio, se limita en un 50% la posibilidad de compensar las pérdidas fiscales de los grupos consolidados hasta el 2024.
Con respecto a las empresas, se reduce del 25% al 23% el impuesto de sociedades para las pymes que facturen menos de un millón de euros, cosa que reducirá los ingresos fiscales en 292 millones y, en cambio, se limita en un 50% la posibilidad de compensar las pérdidas fiscales de los grupos consolidados hasta el 2024, medida que incrementará la recaudación en 2.439 millones.
El nuevo impuesto de solidaridad a las grandes fortunas afectará a un 0,2% de los contribuyentes. Según Montero, «evitará la doble imposición», ya que la cuota abonada por el impuesto de patrimonio en las comunidades que lo aplican –cómo es el caso de Catalunya– será deducible del nuevo gravamen que será del 1,7% para los patrimonios entre 3 y 5 millones de euros; del 2,1% para los que tienen entre 5 y 10 millones y del 3,5% para los que superan los 10 millones.
La ministra ha defendido las medidas «quirúrgicas» que propuesta el ejecutivo español enfrente de las «generalizadas» que promueven «chamanes fiscales».
En este sentido, ha remarcado que los beneficios, por ejemplo, en IRPF están destinados «en los más vulnerables» y por eso se ha optado por aumentar la reducción de rendimientos del trabajo de 18.000 a 21.000 euros, que es el salario mediano en España. De la misma manera, no tendrán que presentar la declaración de la renta las personas que cobren menos de 15.000. Estas dos medidas implican un ahorro de 1.881 millones de euros.
Después de días de negociaciones con los socios, los dirigentes de Unidas Podemos se han mostrado satisfechos por el plan que recoge parte de su programa electoral en fiscalidad, según ha celebrado el portavoz del grupo parlamentario en el Congreso, Pablo Echenique.