La enfermedad súper letal que está resurgiendo en el mundo por el cambio climático, según la OMS
Al menos, en los nueve primeros meses del año, 27 países han informado de brotes de cólera
El cóleraestá resurgiendo en su forma más letal y lo hace ayudado por el cambio climático, ha alertado laOrganización Mundial de la Salud(OMS), que pide a los fabricantes de vacunas que incrementen la producción para detener los casos.
Al menos, en los nueve primeros meses del año, 27 países han informado de brotes de cólera.«No sólo estamos viendo más brotes, sino más brotes mortales.Los datos de que disponemos -que son limitados- muestran que la tasa media de letalidad en lo que va de año casi triplica la de los últimos cinco años», ha señalado el director de la agencia de la ONU, el doctor Tedros Adhanom Gebreyesus.
Solo en las últimas seis semana,se han notificado más de 10.000 casos sospechosos de cólera en Siria. Y en Haití, después de más de tres años sin casos, esta semana se han notificado oficialmente dos casos en la capital, Puerto Príncipe, y se están investigando 20 sospechosos y siete muertes en otras zonas. La agencia de la ONU advierte que es probable que el número real de casos sea significativamente mayor.
«El cólera se nutre de la pobreza y los conflictos, pero ahora se está viendo potenciado por el cambio climático. (...) Los fenómenos climáticos extremos, como las inundaciones, los ciclones y las sequías, reducen aún más el acceso al agua potable y crean el entorno ideal para la propagación del cólera», ha añadido Tedros en una rueda de prensa en Ginebra en la que también trató el riesgo para la salud y el momento actual de la pandemia de COVID-19.
Al respecto, el doctor Philippe Barboza, epidemiólogo de la OMS, ha afirmado que no ha habido un cambio significativos de los múltiples factores que tradicionalmente sirven de caldo de cultivo para el cólera, entre ellos, los conflictos, las crisis humanitarias y la pobreza.
«Lo que ha cambiado significativamente es el impacto del cambio climático», ha advertido Barboza, quien recuerda que «muchos países se han visto afectados por grandes fenómenos climáticos como los ciclones, las sequías, etc, lo que ha alimentado los brotes más allá de lo que normalmente observamos».