Una mujer consigue por primera vez curarse del VIH tras un trasplante de células madre
Las células procedían de sangre de cordón umbilical, en lugar de provenir de donantes adultos compatibles
Por primera vez,una mujer ha conseguido superar el VIHdespués de un trasplante de células madre. En concreto, proceden de sangre del cordón umbilical, en vez de donantes adultos compatibles. La conocida como 'paciente de Nueva York', de mediana edad, con leucemia y con el virus de inmunodeficiencia humana, es la cuarta persona en superar la infección gracias a esta técnica. Tras 30 meses sin tratamiento antirretroviral, los investigadores, conservadores, hablan de una «remisión y posible cura».
Este caso y sus consideraciones preliminares ya se presentaron en un congreso médico hace un año, pero hasta ahora no se habían publicado de manera oficial los resultados de este trabajo encabezado porla Universidad de California (UCLA) y la Johns Hopkins, dados a conocer este jueves por la revista Cell.
Casos anteriores curados
Antes de la 'paciente de Nueva York', ya erradicaron el virus de su organismoel de Berlín(Timothy Ray Brown, fallecido por cáncer en 2020),el de Londres(el británico de origen venezolano Adam Castillejo) yel de Düsseldorf(que prefirió no revelar su identidad).
Todos ellos se sometieron a un trasplante de células madre, que solo se aplica a personas que sufren una enfermedad hematológica al tratarse de «una estrategia muy agresiva y no escalable al resto de la población», de acuerdo con los expertos.
Aunque estos son los cuatro únicos casos en los que es posible hablar de curación, ya se presentó en conferencias científicas la remisión del virus en otra persona, en el Hospital City of Hope de Duarte (California, EE UU). Como los ya sanados,no tiene unas características inmunitarias especialesque le permitan controlar la infección por el VIH de forma espontánea, sino que se ha eliminado del cuerpo como resultado de una intervención médica.
Esto casos de erradicación fruto de una cirugía son diferentes de los decuración funcional, en los que, sin haber recibido ningún trasplante, el propio cuerpo de las personas contaba con «factores especiales» que les permitían controlar el virus en niveles indetectables sin tomar medicación antirretroviral, como la paciente de Barcelona que investiga el Hospital Clínic.