Política
Los restos de Primo de Rivera abandonan el Valle de los Caídos
Una comitiva fúnebre traslada el féretro al cementerio de San Isidro de Madrid
Los restos del fundador de la Falange José Antonio Primo de Rivera han abandonado ya el Valle de los Caídos, renombrado como Valle de Cuelgamuros, y se dirigen en una comitiva fúnebre en el cementerio católico de San Isidro, en Madrid. La exhumación se ha hecho en aplicación de la ley de memoria democrática y se ha preparado con la colaboración de la familia, con quien el ejecutivo español ha mantenido contacto durante meses. El proceso se ha llevado a cabo sin cámaras, y además de la exhumación ha consistido en una misa a la que han asistido unos ochenta de familiares. A las puertas del Valle de los Caídos sólo se ha acercado periodistas y algunos nostálgicos. La fecha coincide con el 120.º aniversario del nacimiento de Primo de Rivera.
Poco antes de las ocho de la mañana han superado el acceso dos coches fúnebres y una furgoneta de soporte. También algunos trabajadores de Patrimonio Nacional, aunque este lunes el recinto cierra a las visitas. En San Isidro los restos se depositarán cerca de las de la familia del fundador de la Falange. En este nuevo lugar no se podrán hacer homenajes a Primo de Rivera.
La exhumación de los restos del fundador de la Falange ha provocado la reacción de Vox. el eurodiputado Jorge Buxadé ha escrito un tuit donde ha acusado al gobierno español de «profanar la tumba» de Primo de Rivera y nuestra historia». «¿Si no respetan a los muertos, alguien cree que respetarán los vivos?», ha escrito.
Por el contrario, la portavoz del gobierno español, Isabel Rodríguez, ha apuntado que la exhumación se enmarca en «la absoluta normalidad» y se lleva a cabo con «rigor científico y técnico» y con «total respeto y acompañamiento a la familia». La exhumación, ha afirmado, se ha hecho de acuerdo con los criterios que pedía la familia, también respecto a la fecha, que coincide con el 120.º aniversario del nacimiento de Primo de Rivera.
La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha afirmado que la exhumación «es una buena noticia para la democracia», pero ha advertido que «hay que aplicar con más eficacia» la ley de memoria democrática «para que los familiares de las víctimas del fascismo tengan reparación». «Hay que sacar a los fascistas de los mausoleos y de las calles», ha escrito en Twitter.
También la vicepresidenta segunda del gobierno español, Yolanda Díaz, que en declaraciones a los medios ha afirmado que con esta exhumación el gobierno español cumple la ley y resuelve una «anomalía histórica». La presencia de líderes fascistas en lugares preeminentes, ha dicho «no pasaría probablemente en ningún país europeo».