El limón, la fruta clave a la cocina y beneficiosa a la salud
Es una de las más comunes de la gastronomía de todo el mundo
Aunque actualmente el limón se cultiva en todo el mundo y se puede encontrar en todos los mercados a lo largo del año, el limonero es originario del sudeste de Asia.
Los botánicos creen que ya se producía desde hace más de 2.500 años y se fue expandiendo hacia Occidente de la mano y conocimiento de los árabes (de hecho, la palabra limón procede del término árabe 'laimún'), que lo difundieron a partir del siglo X por la cuenca mediterránea.
Sin embargo, el limón fue prácticamente desconocido para los griegos y los romanos hasta que ya en la Edad Media comenzó a ser consumido habitualmente.
La pulpa jugosa de ese fruto vistoso y brillante consiguió rápidamente, y debido a su sabor ácido y fresco, ser muy demandado en aquellas zonas en las que, con la extracción de su jugo, sus habitantes conseguían bebidas refrescantes que aliviaban la sed en épocas de altas temperaturas.
El limón es una fruta de escaso aporte calórico y baja en grasa. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), 100 gramos de limón suponen sólo 44 kilocalorias y la ingesta de 0,4 gramos de grasas totales.
Y 100 mililitros de zumo de limón casero aportan el 62% de las necesidades diarias de vitamina C, fundamental para proteger los vasos sanguíneos, beneficiar la salud de los huesos, los dientes y la piel.
Además, la vitamina C del limón ayuda a la cicatrización de heridas; favorece la absorción del hierro y juega un papel crucial en el correcto funcionamiento del sistema inmunitario, por lo que previene las infecciones y otras enfermedades.
Entre los minerales que aporta el limón se encuentran el potasio, selenio, hierro y magnesio en dosis significativas. Junto con la vitamina C y las del grupo B y E que también contiene, potencia la actividad de los glóbulos blancos.
Su consumo regular ejerce una acción beneficiosa sobre el sistema cardiovascular, en casos de arteriosclerosis e hipertensión arterial, debido a que los ácidos cítricos ayudan a oxidar y eliminar las grasas que obstaculizan el trabajo del corazón.
Estimula las secreciones biliares y ayuda a metabolizar las grasas, por lo que es beneficioso para los enfermos del hígado y de la vesícula biliar.
Por sus propiedades refrescantes antisépticas y su contenido en vitamina C, el limón alivia ciertas afecciones de las vías respiratorias, así como algunas inflamaciones de la garganta, afonía y amigdalitis.
En gastronomía, el limón es una fruta muy utilizada no sólo para condimentar o macerar carnes o pescados, también para elaborar salsas, (un chorrito de limón, huevo y aceite son los elementos básicos de la popular mayonesa), y bebidas, debido a que su sutil acidez resalta otros sabores.