Diari Més

Judicial

Barcelona: El acusado de matar a tres personas sin hogar durante el confinamiento acepta 63 años de prisión

El hombre ha reconocido los tres asesinatos y se ha declarado culpable de tres delitos contra la integridad moral

Imatge de la maça d'un jutge.

Barcelona: El acusado de matar a tres personas sin hogar durante el confinamiento acepta 63 años de prisiónPixabay

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El acusado de matar a tres personas sin hogar en Barcelona durante el confinamiento ha aceptado 63 años de prisión en total: 20 por cada delito de asesinato y tres más por tres delitos contra la integridad moral. El acuerdo de conformidad incluye también 30 años de libertad vigilada. El máximo tiempo que cumplirá en prisión es de 40 años.

El hombre se ha reconocido como autor material de las muertes y como culpable de tres delitos contra la integridad moral. La fiscalía pedía prisión permanente revisable o 25 años de prisión por cada crimen. Los hechos tuvieron lugar durante el mes de abril del 2020. El acusado, con problemas de drogadicción, mató a tres sintechos en tres puntos diferentes del Eixample golpeándoles el cráneo con palos.

Según la fiscalía, hacia las 2 de la tarde del 16 de abril, T.F.L., brasileño, que entonces tenía 35 años y no tenía permiso de residencia, agredió con una barra de hierro a un marroquí de 22 años alrededor del Auditorio de Barcelona. La barra procedía de un encofrado y tenía una de las puntas curvadas. Le golpeó el cráneo mientras dormía.

Hacia las 00.40 horas del 18 de abril, el acusado agredió con un palo a otro sin techo en la calle Casp con Pau Claris. Le dio hasta seis golpes en la cabeza mientras la víctima dormía. Por último, hacia las 11 de la noche del 27 de abril, golpeó con una barra de hierro similar a la primera a otro indigente cerca de la Sagrada Familia, en la calle Rosselló con Cerdeña. El hombre fue arrestado el 28 de abril en una caravana donde vivía en Sant Cugat del Vallès.

El fiscal recuerda que las tres víctimas dormían en la calle y eran vulnerables y no pudieron pedir ayuda porque no había casi nadie en la vía pública a causa del confinamiento. Según los forenses, el acusado sufría un trastorno de la personalidad no especificado y trastornos graves por consumo de estimulantes, marihuana y alcohol que le afectaban de forma leve sus capacidades cognitivas y volitivas.

tracking