Identifican nuevos biomarcadores del cáncer de pulmón más frecuente
Los investigadores desarrollan una nueva técnica para analizar cuantitativamente las muestras de tejidos de pacientes
Crean un fármaco que reduce la actividad de uno de los genes más habituales en el cáncer
Investigadores de la Universidad de Barcelona y el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC) han identificado nuevos biomarcadores del cáncer de pulmón de células no pequeñas, el cáncer de pulmón más frecuente. Estos resultados, publicados en la revista 'Modern Pathology', se han conseguido gracias a una nueva técnica que permite analizar cuantitativamente las muestras de tejidos de pacientes.
Se trata de una metodología pionera, más económica y fácil de aplicar que las tradicionales. El estudio constata que determinadas características de las fibras de colágeno -uno de los componentes más abundantes en torno a las células cancerígenas- serían potenciales indicadores para diagnosticar y pronosticar la evolución de la enfermedad.
El cáncer de pulmón es la principal causa de muerte relacionada con el cáncer tanto en hombres como en mujeres en todo el mundo, con una tasa de supervivencia a 5 años del 18%. La mayoría de estos pacientes son diagnosticados de cáncer de pulmón de células no pequeñas, que se subdivide en adenocarcinoma, carcinoma de células escamosas y otros subtipos menos frecuentes. Cada vez hay más evidencias del papel esencial del ambiente rico en fibras de colágeno que rodea las células cancerosas en la progresión de este tipo de cánceres y otros tumores sólidos.
Los investigadores han desarrollado y validado un nuevo enfoque de patología digital para analizar cuantitativamente las fibras de colágeno en muestras de tejidos de pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas. La nueva metodología se basa en imágenes digitalizadas de biopsias de pacientes teñidas con un colorante denominado picrosirius red (PSR) y visualizadas con luz polarizada. Después, los investigadores utilizan el software de código abierto CT-FIRE para segmentar automáticamente las fibras individuales que aparecen en las imágenes y, así, poder cuantificar características relevantes, como la longitud, la anchura o la rectitud.
En cambio, la metodología estándar para analizar las fibras de colágeno se basa en una técnica de microscopia avanzada denominada 'second harmonic generation', que requiere un microscopio confocal de doble fotón, un tipo de microscopio caro y que necesita a un operario experto.
Los investigadores han aplicado su nueva metodología para analizar 195 muestras de pacientes con adenocarcinoma y carcinoma de células escamosas. Los resultados muestran que la rectitud de las fibras sería un potencial biomarcador para diagnosticar la enfermedad, mientras que la densidad sería un indicador de mal pronóstico. Además, el valor pronóstico de la densidad del colágeno sería independiente del estadio clínico del tumor, y demostraría que analizar las fibras de colágeno aporta información adicional relevante.
La nueva metodología también ha permitido comparar las características de las fibras de colágeno de los pacientes con muestras de tejidos no cancerígenas. De esta manera, por primera vez han podido describir cuantitativamente los cambios que tienen lugar en la organización del colágeno en el cáncer de pulmón de células no pequeñas.
Los resultados muestran que, en las muestras de tejidos tumorales, se produce un aumento de la rectitud, la longitud y la anchura de estas fibras, cosa que indica un endurecimiento anómalo del tejido, especialmente en los pacientes con adenocarcinoma. Según los investigadores, este endurecimiento estaría relacionado con varios mecanismos para evitar la respuesta del sistema inmunitario y, consiguientemente, con la progresión del tumor en este tipo de cáncer. Eso abre las puertas a identificar nuevas terapias dirigidas contra el endurecimiento anómalo.
En este trabajo también han participado investigadores del Hospital Clínic, el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), el Centro de Investigación Biomédica en Red de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (CIBER-BBN), el Hospital 12 de Octubre y el Hospital Universitario Parc Taulí.