Judicial
La jueza procesa a Dani Alves por agresión sexual y le impone una fianza de 150.000 euros
El futbolista brasileño ha sido citado el miércoles en el juzgado como última posibilidad de declarar antes del juicio
La magistrada del juzgado de instrucción número 15 de Barcelona ha concluido la instrucción del caso Dani Alves y procesa al exfutbolista brasileño del Barça por violación a una chica de 23 años el 31 de diciembre pasado en el lavabo de un reservado de la discoteca Sutton de la capital catalana. La magistrada considera que hay indicios racionales de criminalidad contra él.
La exdefensa del FC Barcelona ha sido citada el miércoles que viene en el juzgado, por lo cual será excarcelado, se le comunicará en persona el procesamiento y tendrá la oportunidad de hacer una nueva declaración, que sería la tercera en el juzgado desde que fue detenido y encarcelado el 20 enero pasado, según ha adelantado 'El Mundo' y ha confirmado ACN.
La defensa puede recurrir el auto de procesamiento y conclusión de sumario, cosa poco probable porque quiere que se acorten al máximo los trámites, y cuando esta sea firme será el turno de la fiscalía y la acusación particular para presentar sus escritos de acusación. Finalmente será el turno de la defensa y después se tendrá que buscar fecha en la Audiencia de Barcelona para celebrar el juicio.
Alves fue denunciado por agresión sexual por una chica de 23 años que le acusó de haberla violado en el lavabo de un reservado de Sutton. Según la versión mantenida desde el primer momento por la chica, que ha renunciado a una indemnización económica, el astro brasileño la invitó a ella y dos amigas a subir al reservado donde estaban bailando la noche del 30 al 31 de diciembre. Después de flirtear con ella, el brasileño habría entrado en un espacio e hizo ir a la chica, que pensaba que era un lugar para fumar. Una vez dentro, la chica se sorprendió de encontrarse en un lavabo diminuto y quiso salir, pero Alves le habría forzado a practicar sexo con ella.
La versión de la chica se ha visto corroborada periféricamente por varias cámaras de seguridad, testigos, huellas dactilares y lesiones que sufrió. Además, Alves ha cambiado hasta tres veces de versión, negando al principio que conociera a la chica, después de que el sexo fue instigado por ella y finalmente que fue consentido por los dos. Ninguna de las versiones de Alves le han servido para salir de la prisión, ni tampoco sus esfuerzos por demostrar el arraigo en Cataluña que minimizaría el riesgo de huida.