Animales
El Zoo de Barcelona adopta medidas para paliar los efectos del incremento de temperaturas
El objetivo es «refrescar y entretener» los animales durante los episodios de calor intenso
El Zoo de Barcelona ha adoptado medidas para paliar los efectos del incremento de temperaturas. El objetivo, según Jordi Hernández, jefe de conservadores del espacio, es «refrescar y entretener» a los animales durante los episodios de calor intenso de este verano. Por eso, el Zoo se ha comprometido a permitir el libre acceso de los animales en espacios exteriores e interiores, a cambiar más a menudo el agua de los abrevaderos y a revisar las temperaturas cada día, entre otras medidas.
Según los cuidadores, «no son medidas adicionales», sino que se trata del protocolo habitual de verano del Zoo, que se ha puesto en marcha independientemente que este año las temperaturas sean más elevadas. Eso sí, las medidas se han elaborado teniendo en cuenta la situación de sequía. El protocolo de verano del Zoo prevé que los animales puedan acceder en cualquier momento a los cobijos o zonas interiores de sus instalaciones, para reducir en todo momento los efectos del calor intenso. El objetivo, según Hernández, es que los mismos animales «puedan escoger y estén en el lugar donde ellos quieren estar».
Con respecto a los alimentos, se han incorporado a la dieta de algunas especies «helados hechos con zumos de fruta y trozos de verdura» que los animales reciben en los patios exteriores, aparte de su alimento habitual. De esta manera, animales como los chimpancés «se entretienen y se refrescan encontrando pequeños trozos de fruta y comida», tal como ha destacado el jefe de los conservadores.
En este sentido, Hernández también ha explicado que hay medidas concretas para los animales que, por su especie, sufren más los efectos del calor. En estos casos, como es el del panda rojo, se incrementan las medidas, y se riegan «de forma más amplia» los espacios para bajar la temperatura de la zona. Sin embargo, los conservadores han asegurado que ninguna de las especies que hay actualmente en el Zoo «tiene problemas graves para convivir con estas temperaturas». «Son especies que están adaptadas y podemos trabajar con ellas asegurando su bienestar», ha expresado Hernández.
Un protocolo adaptado a la situación de sequía
Todas estas acciones, según los conservadores, están comprometidas con la sostenibilidad y el ahorro de agua ante la actual situación de sequía. Aunque el Zoo está excluido de algunas de las medidas de ahorro de agua del protocolo de actuación del Ayuntamiento, el equipo ha puesto en marcha medidas para conseguir un ahorro diario de 200 metros cúbicos de agua. Esta cantidad equivale prácticamente al consumo de agua diario que realizan 1.800 habitantes de Barcelona, según los cuidadores. De todos modos, el zoo mantiene vigentes las restricciones de acequia de céspedes y prados y el cierre de las fuentes ornamentales.