Encuentran dos nuevas especies de gusanos marinos en una cueva de Mallorca

Un grupo de investigadores ha encontrado dos nuevas especies de gusanos marinos en una cueva de Mallorca alejada del mar, de difícil acceso y sin luz natural. El hallazgo lo han hecho investigadores de la Universidad de Baleares (UIB), el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA-CSIC) y con la participación del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC) y el Consiglio Delle Ricerche (CNR).

Uno de los poliquetos descubiertos pertenece a un género también nuevo, mientras que el segundo se incluye en el grupo taxonómico conocido vulgarmente como gusanos espagueti. Los científicos también han detectado la presencia de un tercer poliqueto que ya se había conocido pero se desconoce cómo ha llegado hasta la cueva. El grupo de investigación ha encontrado las dos nuevas especies en una cueva aniquialina de la isla de Mallorca. Se trata de una cavidad aparentemente alejada del mar pero llena de agua distribuida en dos capas: una es la que proviene de la lluvia y la segunda es agua salada y proviene por la filtración lenta del mar.

La cueva es de difícil acceso y no tiene luz natural. Por su aislamiento hay pocos nutrientes y el oxígeno queda muy disuelto en el agua. Eso hace que la llegada y la supervivencia de los organismos sea muy limitada. Los poliquetos viven bajo los sedimentos de la cueva, a 18 metros de profundidad.

El primero de los gusanos descubiertos mide unos dos centímetros, no tiene ojos y es prácticamente transparente. Sólo se puede ver el cerebro, que tiene un pigmento rojo muy característico. El dorso está cubierto de escamas y tiene dos pares de mandíbulas con forma de pico de loro. Este gusano marino vive entre los sedimentos aunque salió y nadó rápidamente con formas sinuosas cuando llegaron los submarinistas.

El anélido descubierto está emparentado con linajes que habitan en las profundidades abisales del Pacífico y la platafroma continental antártida. Eso hace pensar que la presencia de este gusano marino se remonta muchos años atrás, cuando la configuración de los continentes era muy diferente al actual.

Un nuevo gusano espagueti

El segundo gusano descubierto forma parte del grupo conocido como gusanos espagueti, aunque se trata de una especie nueva que no se había descrito nunca. Mide unos cinco centímetros pero su cuerpo es muy blando y se estira y se contrae de forma significativa. Es de color amarillento y podría ser bioluminiscente, aunque esta característica se prevé comprobar en nuevas expediciones a la cueva. Esta especie vive en tubos construidos por los propios animales con los sedimentos de los alrededores y normalmente sólo se ven los numerosos tentáculos que tienen, largos y delgados, a partir de los cuales captan la alimentación.

El grupo de investigación también ha hecho un tercer hallazgo de menor importancia, ya que ha detectado un poliqueto dentro de la cueva que ya está catalogado pero siempre en cavidades conectadas directamente al mar y en ambientes semi oscuros de zonas rocosas. El hecho de que haya esta especie dentro de la zona explorada plantea enigmas como la manera en la que el poliqueto ha accedido a la cueva. Una de las posibilidades es que lo hiciera cuando el nivel del agua era muy superior al actual. El grupo de investigación empezó el descubrimiento en el 2019 con una primera expedición científica a la cueva. Un año después, los investigadores volvieron a hacer inmersiones. A partir de aquí se han hecho las tareas de investigación pertinentes para confirmar los descubrimientos.