Sucesos
Se cae un grupo criminal en Tarragona que obligaba a tres mujeres a prostituirse en la calle y a vigilar plantaciones de marihuana
La Policía Nacional ha detenido a cinco personas y ha hecho registros en domicilios de Salou, la Ametlla de Mar y Miami Platja
La Policía Nacional ha desmantelado un grupo criminal en Tarragona que obligaba a tres mujeres a prostituirse en la calle y a vigilar plantaciones de marihuana indoor. Se han detenido cinco personas –dos de las cuales han ingresado en la prisión- y se han hecho registros en domicilios de Salou, la Ametlla de Mar y Miami Platja. En estas viviendas se han decomisado cuatro teléfonos móviles y numerosa documentación. Algunos de los integrantes de esta organización criminal violaron y golpearon a una de las víctimas, que tuvo que ser hospitalizada en estado grave por las lesiones. El grupo criminal estaba formado por un clan familiar de origen rumano, que presuntamente se dedicaba a captar mujeres y trasladarlas a España con la falsa promesa de un trabajo legal.
Una de las implicadas aprovechaba su condición de mujer para no levantar sospechas a las víctimas y las engañaba diciendo que iban a trabajar en el sector de la limpieza o de la hostelería, según detalla la Policía Nacional. Los investigadores detectaron que los implicados salían de Rumania vía aérea hasta Barcelona y después se desplazaban en coche en Tarragona. Les víctimas eran obligadas entonces a ejercer la prostitución en la vía pública o en prostíbulos. Además, se exigía a las mujeres que contrajeran matrimonio con miembros del clan criminal a fin de que su actividad delictiva no se detectara durante los viajes.
Los integrantes del grupo criminal golpeaban y amenazaban a las víctimas, llegando a violar repetidas veces y lesionar de gravedad a una de ellas, que acabó hospitalizada. Además, exigían a las víctimas que controlaran plantaciones de marihuana tipo indoor de la organización. La droga se transportaba hacia Italia y allí se vendía, con más beneficios para la red criminal. El operativo policial se inició a partir de una investigación de la policía de Rumania y ha culminado con la liberación de tres víctimas en Tarragona y cinco detenidos acusados de los delitos de tráfico de seres humanos con finalidad de explotación sexual, delito contra la salud pública, agresión sexual, lesiones, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal.