VIVIENDA
El Govern cierra la compra de 692 viviendas para destinarlas a alquiler social
Las adquisiciones se han gestionado entre la promotora pública Instituto Catalán del Suelo (Incasol) y la Agencia de Vivienda de Cataluña
La Generalitat de Catalunya ha cerrado en los últimos meses la compra de 692 viviendas, una parte en manos de grandes propietarios, para destinarlas a alquiler social, que se suman al objetivo que se ha puesto de adquirir 1.500 pisos antes de 2026.
Según datos del departamento de Territorio, de las adquisiciones que ya están cerradas, 385 se han gestionado desde la promotora pública Instituto Catalán del Suelo (Incasol) y son bloques enteros vacíos o edificios en construcción, mientras que la Agencia de Vivienda de Cataluña ha comprado otros 307 pisos sueltos.
La actualización de cifras se ha hecho coincidiendo con la visita este viernes del presidente catalán, Pere Aragonès, a una promoción de 24 viviendas que ha comprado el Govern en Salt (Girona), que requerirán unas obras de adecuación antes de ponerlas en unos meses a disposición de familias con pocos ingresos.
«Estos pisos estaban vacíos y estaban en el mercado, formando parte a veces de las dinámicas vinculadas a la especulación inmobiliaria, pero los sacamos de esa dinámica y los ponemos al servicio del derecho de la vivienda para el conjunto de la ciudadanía», ha destacado el president, acompañado por la consellera de Territorio, Ester Capella.
«Después de años de políticas demasiado tímidas, hemos llevado a cabo un punto de inflexión desde hace un año en las políticas de vivienda en Cataluña, una prioridad que es que la vivienda pase a ser un derecho y no un bien de mercado», ha añadido Aragonès.
La compra directa de pisos es una de las vías que ha desplegado el Govern para llegar a 10.000 viviendas nuevas para alquiler social en 2026, que cuenta con otros mecanismos, como la subvención a desarrollos inmobiliarios privados.
El objetivo es aumentar en un 18 % en tres años el parque público de vivienda social de Cataluña, que actualmente se cifra en unos 55.000 pisos.
«Estamos usando todas las fórmulas que tenemos a nuestra mano para que la vivienda pública de nuestro país de un salto adelante», ha insistido Aragonès.
El proceso para la compra directa de bloques enteros se ha hecho en su mayoría gracias a un concurso público que abrió Incasol a mediados del año pasado para la adquisición de bloques de viviendas plurifamiliares en construcción o totalmente acabados y que eran propiedad de grandes tenedores.
El plan de Incasol tiene el objetivo de movilizar el parque de viviendas vacías y fomentar la rehabilitación de esos inmuebles. En algunos casos, los bloques adquiridos por el Govern estaban construidos y sin uso desde hace más de una década.
En total, el departamento de Territorio tiene prevista una inversión de 150 millones de euros en tres años para la compra directa de viviendas.