Estos son los alimentos que tienes que evitar por la mañana para tener vitalidad
El azúcar y el pan están en el punto de mira
Tras un buen descanso qué mejor que afrontar el nuevo día con un estupendo desayuno. Un momento en el que se presenta el dilema de elegir entre alimentos saludables o aquellos que satisfagan de forma inmediata una (supuesta) necesidad de azúcar. Una dieta mediterránea como la de España posibilita tener acceso a fruta, frutos secos o aceite de oliva, alimentos con un alto valor nutricional. La importancia de apostar por un desayuno saludable es tal que incluso influye el control del peso corporal o la mejora de la atención y la función cognitiva.
Tanto para la población adulta como para la infantil es fundamental la primera comida del día, hasta el punto de que alimentación elegida provoca beneficios más allá de calmar el apetito tan importantes como desconocidos. En el caso del desayuno infantil, los expertos señalan una tríada infalible en la que se combinan salud y energía: cereales (preferiblemente enteros/ integrales), producto lácteo, y una fruta.
La fórmula más saludable obliga a prestar un poco más de atención y elaboración en este primer momento del día, pero como contrapartida aseguramos que nuestra alimentación sea equilibrada. Las frutas de temporada o los cereales integrales son dos buenas opciones para asegurar un buen aporte proteico y vitamínico. La pregunta es, por tanto, ¿qué alimentos deberíamos evitar a primera hora del día?
¿Qué pasa si tomo pan blanco por la mañana?
No se trata de eliminar el pan del desayuno sino de consumir harinas poco o nada refinadas, ya que estas tienen déficits en los nutrientes que más beneficios aportan al organismo, como fibra, minerales o vitaminas. El pan integral, que contiene minerales esenciales como el magnesio, ayuda a un mejor metabolismo de la glucosa y por tanto se presentaría como la mejor opción. Cuanto más regulada la glucosa, menos sensación de cansancio.
Bollería industrial: qué pasa si comes en exceso
Los alimentos ultraprocesados como es este caso, son también ricos en harinas no refinadas, grasas y azúcares, por lo que su ingesta, lejos de ser diaria, debería limitarse a consumos (muy) esporádicos. La realidad es que el embalaje y sus divertidos diseños hacen las delicias de los más pequeños, y se impone por tanto un especial cuidado: un desayuno saludable no solo aporta vitalidad sino que reduce el riesgo de enfermedades cardiometabólicas. Con este tipo de ingesta se sobreestimula la producción de insulina y, de nuevo, sensación de cansancio poco después de desayunar.
¿Qué aportan los cereales con azúcar?
Como se ha indicado con respecto al pan blanco, la recomendación no pasa por dejar de consumir cereales, sino por poner la lupa en el tipo de cereal, priorizando aquel que esté en grano entero, sin procesar. En segundo lugar, es importante chequear qué cantidad de azúcar contienen dichos cereales: si es mayor de 15 gramos por cada 100 se considera un alimento ultraprocesado. Ese nivel abusivo de glucosa en sangre provocará directamente una sensación de falta de energía.