Nace la primera asociación catalana de pacientes de homeopatía

El próximo lunes 10 de abril se celebra el Día Internacional de la Homeopatía, una terapia medicinal considerada alternativa, que utiliza preparados sin ingredientes químicos activos. En Cataluña, un gran número de pacientes de esta terapia se han unido para formar la Asociación Catalana de Pacientes, Amigos y Usuarios de la Homeopatía (ACPAUH), pionera en el territorio catalán y que hace justo|nada más tres meses que ha visto la luz. De hecho, en España sólo hay asociaciones similares al País Vasco, Andalucía y el Canarias.

El presidente del ACPAUH, Miquel Peralta, explica algunos de los motivos que llevaron a poner en marcha la asociación: «Principalmente queremos dar nuestro punto de vista como pacientes de la homeopatía y reivindicar el derecho del paciente a gestionar su salud». Esta segunda idea no va sólo ligada a esta terapia, sino que es aplicable a todas las enfermedades y todos los pacientes, tal como se recoge al decálogo del European Patients Fortum, que hermana asociaciones de pacientes de todas las enfermedades.

En Cataluña, igual que en el resto del territorio español, la homeopatía tiene una lucha constante contra «informaciones sesgadas y descalificaciones» que la tildan de pseudociencia o de placebo. Según Peralta, estas desinformaciones «contrastan mucho con la grata experiencia que nosotros tenemos como pacientes de la homeopatía». En este sentido, el presidente del ACPAUAH envidia algunos países europeos donde esta terapia está más adelantada: «Hay veterinarios que están utilizando homeopatía con animales y obteniendo muy buenos resultados». Según Miquel Peralta, no tiene ningún sentido decir que «la homeopatía no es nada cuando está demostrado que da resultados positivos».

Además de los ingredientes, la homeopatía se desmarca de la medicina tradicional porque «se centra en el ámbito más personal, no busca sólo tratar enfermedades sino que actúa en el ámbito más general». Al fin y al cabo, sin embargo, no deja de ser un tratamiento que «de manera directa o complementaria ayuda a mejorar la salud de las personas» y por eso los medicamentos homeopáticos pasan sus controles de calidad y están regulados y aceptados por la ley.

Uno de los principales escollos, además de la mala imagen que se da, es que la homeopatía no entra en la seguridad social y, por lo tanto, sus tratamientos son privados. Aun así, Peralta defensa que «los remedios homeopáticos no son caros». En este sentido, es donde la ACAUH incide más en la idea de hacer llegar el punto de vista de sus usuarios: «No podemos explicar lo mismo que explican los médicos pero si que podemos aportar nuestras vivencias a aquellos que quieran apostar por la homeopatía o, simplemente, la quieran conocer».