Puigdemont, Junqueras, Colau y Forcadell envían una carta a Rajoy Y Felip VI para pedir diálogo sobre el referéndum
En la misiva denuncian que el Estado ha puesto en marcha una «ofensiva sin precedentes»
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el vicepresidente, Oriol Junqueras, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, han enviado una carta al presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y al rey Felipe VI para pedirles diálogo sobre el referènum. Un llamamiento al diálogo para abordar de qué manera nos podemos poner de acuerdo porque los catalanes celebramos el referéndum. Un diálogo abierto y sin condiciones», defienden. Las principales autoridades de Cataluña también denuncian que el Estado ha puesto en marcha una «ofensiva de represión sin precedentes» y citan como ejemplos la limitación del derecho a la libertad de expresión, impedir actos públicos, amenazar medios de comunicación o incluso detener al 75% de los alcaldes catalanes por mostrarse dispuestos a participar en el 1-O.
Los cuatro firmantes de la carta reclaman «un diálogo político, desde la legitimidad que cada uno representa, para hacer posible lo que en democracia nunca es un problema ni todavía menos un delito: escuchar la voz de la ciudadanía» y explican que también hacen extensiva la misiva al rey Felipe VI para que «entienda que no dialogar es incompatible con la resolución de los problemas».
Según Puigdemont, Junqueras, Colau y Forcadell, entre Cataluña y el Estado existe un «evidente conflicto político que viene de lejos» y recuerdan que han intentado resolverlo con el «máximo acuerdo». «Pero la respuesta siempre ha sido una negativa, o peor todavía, una reacción regresiva insostenible», añaden. El presidente y vicepresidente de la Generalitat, la presidenta del Parlamento y la alcaldesa de Barcelona también hacen constar que se ha propuesto un pacto fiscal en la línea del País Vasco o se ha propuesto la celebración de una consulta de carácter no vinculado pero que «no lo ha sido la única respuesta».
Por otra parte, la misiva también traslada al presidente español y al rey que se constituyó el Pacto Nacional del Referéndum «que aspiraba a un diálogo que tampoco fue posible» y que sus responsables han acabado investigados por la Justicia, «como si se tratara de una actividad ilícita»; además de señalar que el Código Penal «confirma que convocar un referéndum, aunque sea sin acuerdo, no es nunca un delito».
Los cuatro dirigentes también manifiestan que cuentan con el apoyo «incuestionable» de la sociedad catalana a un referéndum y se remiten a las resoluciones aprobadas por el Parlament de Catalunya y en las manifestaciones durante la Diada los últimos años, que, remarcan, han sido «siempre pacíficas y convivenciales» y «elogiadas por la prensa internacional como un ejemplo de civismo».