Josep Maria Jové cesa como secretario general de la Vicepresidencia
El decreto aprobado por el Gobierno busca para protegerlo de la multa de 12.000 euros diarios impuesta por el TC
Josep Maria Jové ha cesado como secretario general de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda. El decreto, aprobado en un consejo ejecutivo extraordinario en el Palau de la Generalitat, busca protegerlo de la multa impuesta este jueves por el TC de 12.000 euros diarios. El conseller de la Presidencia y portavoz del Gobierno, Jordi Turull, ha explicado que el alto tribunal pedía a Jové «una serie de acciones» que es «imposible» que pueda hacer mientras está detenido y entiende que la «mejor manera» de protegerlo «despropósito» es el decreto de cese. Asimismo, ha reiterado su «reconocimiento, agradecimiento profundo y confianza» hacia el hasta ahora secretario general de la Vicepresidencia. «El Gobierno expresa su condena e indignación», ha declarado en referencia a las actuaciones de la Guardia Civil de los últimos días.
Turull también ha explicado que la decisión del cese es «compartida» entre Juvé, su abogado y el Gobierno, y ha añadido que en las próximas «horas o días» el consejero|conseller de Economía, Oriol Junqueras, explicará cómo queda «reorganizado» el departamento. Las responsabilidades de Juvé las puede asumir el propio vicepresidente o bien se pueden delegar «para garantizar que funcione la conselleria», tal como ha apuntado a Turull, que ha reiterado que la redistribución de tareas se hará pero que es competencia de Junqueras.
Sobre los «planes de contingencia» que anunció este jueves por la noche el presidente, Carles Puigdemont, para garantizar el 1-O, el portavoz del ejecutivo se ha limitado ha pedir que la gente «confíe» en el Gobierno.
Un 70% de colegios habituales
Con respecto a los colegios electorales -que dio a conocer el propio Puigdemont este jueves por la tarde-, Turull ha dicho que aproximadamente un 70% de las sedes del 1-O son los mismos que los de las últimas elecciones. A pesar de matizar que la cifra es un «trazo grueso», ha afirmado que la gran mayoría de locales son los habituales que en los anteriores comicios.
El portavoz del Gobierno ha garantizado que el ejecutivo está «concentrado» al hacer posible el referéndum, y ha subrayado que el 1-O está «en manos de la gente» y que, por lo tanto, «la batalla está ganada». Además, ha sentenciado que el Estado se equivoca si cree que deteniendo miembros del Gobierno conseguirá que la gente «se marche a casa». «El tsunami se multiplicará por dos», ha manifestado Turull, que se ha mostrado convencido que hay gente que no tenía previsto ir a votar el 1-O pero que finalmente irá al ver la actuación del gobierno español y de la policía.
Sobre la Sindicatura Electoral, cuyos miembros también están en el foco del Estado, Turull ha recordado que es competencia del Parlamento y no del Gobierno. Finalmente, y sobre una posible huelga general en caso que el Estado impidiera el 1-O, Turull ha concluido que el ejecutivo no se plantea ningún otro escenario que no sea el del referéndum.
La presienta de la Sindicatura de la Vall d'Aran renuncia
Por otra parte, la presidenta de la Sindicatura en la Vall d'Aran, Carme Vilanova, ha renunciado para evitar la multa diaria de 12.000 que ha impuesto el TC en los miembros de las Sindicaturas Electorales.