Puigdemont avisa de que la «brutalidad policial» avergonzará para siempre a los que la justifican y no para el deseo de votar
El presidente de la Generalitat dice que «hoy todavía queda más claro en ojos del mundo» lo que Cataluña se está jugando
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha avisado de que la «brutalidad policial» avergonzará «para siempre» a los que lo están justificando. «Es evidente que el uso irracional e irresponsable de la violencia por parte del estado español no para el deseo de los catalanes de poder votar democráticamente y pacíficamente», ha dicho en una visita al pabellón de Sant Julià de Ramis (Gironès), dónde inicialmente Puigdemont tenía que votar este 1-O. «Hoy queda todavía más claro, en ojos de aquellos que tenían dudas y de todo el mundo, el qué nos jugamos en jornadas como las de hoy», ha añadido. El presidente de la Generalitat ha asegurado que «la violencia, las porras, las balas de goma y las agresiones» contra los ciudadanos incrementa las «cuotas de vergüenza» del Estado en el exterior. Y delante de eso, Puigdemont hay contraponer la «imagen de dignidad y de coraje de la gente anónima, que vence el miedo y hace cola para poder votar».
Recibo con gritos de «¡Votaremos, votaremos!» «Independencia!» y claveles, el presidente de la Generalitat ha ido esta mañana hasta el pabellón deportivo de Sant Julià de Ramis. Allí estaba donde, inicialmente, Carles Puigdemont tenía que votar este 1-O, pero la intervención de la Guardia Civil –que ha entrado con violencia en el pabellón y ha decomisado el material del referéndum- ha hecho que el presidente votara en Cornellà del Terri.
Puigdemont ha llegado poco después de las once y cuarto de la mañana al pabellón, donde ha saludado el gentío que se reunía en el exterior. Dentro, y ante numerosos medios de comunicación, el presidente ha lanzado un duro mensaje contra el Estado. «Es evidente que el uso injustificado, irracional e irresponsable de la violencia por parte del estado español no para el deseo de los catalanes de poder votar pacíficamente y democráticamente», ha dicho.
Para el presidente, las cargas policiales contra la ciudadanía han hecho «que hoy todavía quede más claro, a ojos de aquellos que todavía tenían dudas y de todo el mundo, lo que nos jugamos en jornadas como las de hoy». «Violencia, porras, balas de goma y agresiones indiscriminadas contra gente que, pacíficamente, se había concentrado para proteger urnas, papeletas y colegios; la imagen exterior del Estado ha seguido empeorando y ha llegado a unas cuotas de vergüenza que lo acompañarán para siempre», ha afirmado Puigdemont.
Ante la imagen de los agentes irrumpiendo en colegios electorales y haciendo uso de la violencia, el presidente de la Generalitat ha querido contraponer la de «dignidad y coraje de toda aquella gente anónima que hoy vence el miedo y hace cola para ir a votar; esta imagen también nos acompañará para siempre», ha dicho el presidente, refiriéndose al espíritu cívico de los catalanes.
«Hemos conquistado mucho más»
«La violencia desmesurada ha contribuido a aclarar las incógnitas de aquello que nos jugábamos hoy, y a hacer patente que el 1-O trataba de democracia», ha remachado el presidente. Puigdemont ha dicho que la imagen exterior de España ha quedado tocada para siempre, fachada aquella de la gente que hace colas para «conseguir votar y decidir libremente» el futuro de Cataluña.
«El Estado ha perdido hoy mucho más del qué había perdido hasta ahora; y delante de eso, los ciudadanos de Cataluña hemos conquistado mucho más del qué habíamos conquistado hasta ahora», ha concluido. Después de este mensaje, el presidente de la Generalitat ha salido al exterior del pabellón, donde la gente lo ha ovacionado, y se ha marchado con el coche oficial.