La Guardia Civil marcha del CTTI después de un registro de cuatro horas para localizar correos de los Mossos sobre el 1-O

La Guardia Civil ha finalizado el cacheo en el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) este viernes poco después de las dos del mediodía. Cinco agentes de paisano han salido del aparcamiento soterrado en dos vehículos sin logotipar cuatro horas después de haber accedido a las instalaciones. El registro se ha llevado a cabo por orden del titular del juzgado de instrucción número 4 de Lérida, que ha pedido a la Guardia Civil que obtuviera los correos electrónicos de un mando de los Mossos D'Esquadra de Ponent relacionados con la celebración del referéndum del 1 de octubre. La situación ha molestado a los trabajadores del CTTI, que han lamentado que la Guardia Civil haya devuelto en las oficinas, como ya hizo días antes de la consulta vinculante. «No queremos que se normalice la presencia de cuerpos de seguridad a nuestro puesto de trabajo», han expresado a los trabajadores en un paro simbólico a media mañana.

El registro, según han apuntado fuentes judiciales, forma parte de la investigación por la presunta inacción de la policía catalana para impedir la celebración del referéndum el pasado 1 de octubre. La causa, sin embargo, se encuentra bajo secreto de sumario y no ha trascendido si este viernes los agentes han encontrado la información que buscaban en el CTTI o si se han llevado cualquier otro material.

La llegada de los dos vehículos policiales sin logotipar se ha producido en torno a las 10.00 h, bajo una atenta expectación mediática, ya que numerosos medios ya estaban en las puertas del centro de telecomunicaciones esperando la llegada de los agentes. Al mismo tiempo, en la zona ya se había desplegado un dispositivo de los Mossos D'Esquadra para garantizar la seguridad del registro.

Por otra parte, el operativo de este viernes ha inquietado a buena parte de los trabajadores del CTTI, que han expresado su rechazo a la presencia de la Guardia Civil. Tanto es así que a media mañana unos cuarenta miembros de la plantilla han hecho una concentración silenciosa delante de la oficina durante más de 30 minutos. Con el paro, han cortado el tráfico de la calle Salvador Espriu con una bandera y también han exhibido carteles reclamando la salida de la prisión de los presidentes de Òmnium y la ANC.

Al final de la protesta, Josep Vilalta, miembro del comité de empresa, ha detallado que el paro pretendía demostrar que los trabajadores están «cansados» de que se repitan los cacheos policiales en sus oficinas, ya que el pasado 30 de septiembre ya hubo otro registro, también relacionado con la celebración del referéndum. «Lo que queremos es seguir trabajando con normalidad», ha añadido Vilalta, reclamando que «no se normalice la presencia de cuerpos de seguridad» al CTTI.