Un centenar de intelectuales andaluces piden un referéndum pactado en Cataluña

Un centenar de escritores, artistas, músicos, cineastas o periodistas andaluces han firmado un manifiesto titulado 'Andalucía por el diálogo', en el que piden un referéndum pactado para Cataluña. Entre los intelectuales adheridos se encuentran los escritores José Manuel Caballero Bonald, Luis García Montero, Ángeles Mora y Juan de Loxa, el exjuez Baltasar Garzón y el catedrático de derecho constitucional Javier Pérez Royo, los cineastas Alberto Rodríguez y Benito Zambrano, los actores Salvador Távora, Juan Diego y Antonio de la Torre, el guionista Rafael Cobos y el músico Kiko Veneno, entre otros. El texto apuesta por una resolución de la crisis catalana por la vía del diálogo y la mediación con el objetivo de acordar un referéndum con garantías democráticas. Asimismo, proponen abrir un proceso constituyente en el cual, «sin precipitaciones y sin miedos», se pueda debatir el modelo de Estado.

En el texto, recogen que el proceso catalán es la expresión «más cruda» de la realidad subyacente, que pone en crisis el modelo territorial y reclaman la necesidad de abrir un proceso constituyente o un nuevo pacto constitucional.

Por eso, hacen un llamamiento al diálogo y a la resolución democrática del conflicto y entienden que se tiene que dar un «paso atrás» a las voces que pretenden conducir una crisis subyacente hacia una salida represiva y recentralizadora. Paralelamente, creen que es un «error» considerar que se trata de un «choque de trenes» que se observa «desde el andén».

En este sentido, los firmantes piden no utilizar las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en una batalla que entienden que tiene que ser «política y democrática». «No queremos a nuestros vecinos, hermanos e hijos, muchos andaluces, sometidos a las órdenes irresponsables de mandos políticos contra el ejercicio de libertades civiles básicas en Cataluña», recogen y claman contra no repetir las imágenes del 1-O.

En este sentido, también piden dejar de ver a los responsables políticos «tras una barricada discursiva irresponsable y belicista con la calculadora de votos en la mano».