La Mesa del Senado veta a Mascarell al debate sobre el 155 porque no es miembro del Consejo Ejecutivo

La Mesa del Senado (configurada por PP, PSOE y PNV) ha vetado la participación del delegado del Gobierno en Madrid, Ferran Mascarell, en la comisión donde se debate el 155. El argumento, es que no es miembro del Consejo Ejecutivo. Este jueves 26, en las alegaciones presentadas por el presidente, Carles Puigdemont designaba a Mascarell como representante del Gobierno en la comisión.

Mascarell ha llegado a entrar en la sala donde se celebraba la sesión e incluso el presidente, Pío Garcia Escudero, lo ha saludado. Ahora bien, ha recordado que había un acuerdo de la mesa que consideraba que no tenía que intervenir y que no se iba a cambiar. Varios grupos, como PDeCAT, ERC, Podemos y PNV, han expresado sus quejas y han argumentado que es un representante del Gobierno. Para Mascarell, esta decisión es una «expresión sublime de la escasa voluntad de diálogo».

Después de que Puigdemont decidiera no ir al Senado a defender las enmiendas del 155, esta mañana a través de un burofax ha informado de que enviaba, en representación del Gobierno, al delegado en Madrid, Ferran Mascarell.

La comisión estaba fijada para las cinco, a la misma hora que Puigdemont ha comparecido desde Palau. Mascarell ha entrado en la sala acompañado de los senadores del PDeCAT. Ha cogido asiento en la primera fila y el presidente del Senado, Pío Garcia Escudero, le ha dado la bienvenida. Ahora bien, ha informado de que por acuerdo de la mesa no podría intervenir.

Eso ha provocado las quejas de grupos como PDeCAT, ERC, Podemos y PNV que han tomado la palabra para defender que «todo diálogo es bueno» y que consideraban que Mascarell era un representante del Gobierno y que, por lo tanto, podía intervenir. El argumento de la Mesa, sin embargo, es que en caso de que Puigdemont no venga tenía que designar a un conseller en su lugar.

«No hay voluntad de diálogo»

A la salida, Mascarell ha reconocido que el veto de la Mesa supone una «expresión sublime de la escasa voluntad de diálogo». «Se supone que el diálogo se establece hablando y no, no dejando hablar», ha manifestado Mascarell, que asegura que el estado español «va hacia la vía autoritaria». «Es una pena porque es bueno escuchar las razones del pueblo catalán y nos ratifican en que no hay ninguna voluntad de diálogo», ha remachado.

Según Mascarell, «nadie quiere escuchar las razones de los catalanes que apuestan por la independencia». Además, ha lamentado que nadie le ha dado las explicaciones en persona de porque no podía comparecer.