La querella contra el Gobierno por rebelión cae a manos de la jueza Lamela, que tendrá que decidir si se lo queda
La jueza lleva el caso de Sánchez y Cuixart
La querella por rebelión, sedición, malversación de fondos y otros delitos conexos que la Fiscalía General del Estado ha presentado en la Audiencia Nacional contra el presidente Carles Puigdemont y los miembros de su gobierno ha ido a parar en manos de la jueza Carmen Lamela, que ya lleva el caso de la querella por sedición contra los presidentes de l'ANC y Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, en prisión preventiva desde el 16 de septiembre. Lamela ha recibido la querella porque su juzgado –el número 3- se encuentra de guardia en el momento del registro de la querella. Ahora puede actuar en dos direcciones: o bien quedárselo considerando que tiene conexión con el caso de Sànchez y Cuixart, o bien devolverlo al decanato para que vuelva a repartirse para que lo coja algún otro magistrado.
Cuixart y Sànchez se podrían presentar a las elecciones del 21-D a pesar de estar en prisión preventiva
Por otra parte, los presidentes de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, y de l'ANC, Jordi Sànchez, podrían presentarse a las elecciones en el Parlamento del próximo 21 de diciembre, aunque estén en prisión preventiva por un posible delito de sedición y a petición de la fiscalía. La Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), que es el que regula los comicios en la cámara catalana a falta de una ley electoral propia, sólo prohíbe el sufragio electoral pasivo, o sea, ser elegido, a las incapacidades judicialmente por enfermedad, o a los condenados con sentencia judicial firme mientras dure la pena.