La Audiencia Nacional ordena la detención de Puigdemont y de los consellers destituidos que están en Bélgica

La jueza de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, ha dictado una orden de detención europea y otra de búsqueda y captura a nivel nacional e internacional e ingreso en la prisión para el president Carles Puigdemont y los cuatro consellers destituidos que están en Bélgica, Antoni Comín, Meritxell Serret, Clara Ponsatí y Lluís Puig. La Fiscalía pidió el jueves esta medida, pero Lamela no ha dictado el orden hasta este viernes 3 de noviembre. La magistrada pide que se los detenga por rebelión, sedición, malversación, prevaricación y añade también el delito de desobediencia a la autoridad. Lamela ha rechazado la petición que habían hecho declarar por videoconferencia desde Bélgica, país donde se encuentran. Según la resolución judicial, «no concurren ninguno de los casos para autorizar la medida». La misma jueza dictó este jueves prisión incondicional para Oriol Junqueras, Raül Romeva, Carles Mundó, Jordi Turull, Josep Rull, Joaquim Forn, Dolors Bassa y Meritxell Borràs.

Después de que Puigdemont, Comín, Serret, Ponsatí y Puig no se presentaran en la Audiencia Nacional el jueves, el ministerio público pidió su detención para que comparezcan lo más pronto posible. En su petición, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, afirmaba que «constan reiterados intentos de entregar la citación en su domicilio, así como reiteradas llamadas telefónicas en las cuales se ha hecho caso omiso». Además, añadía que Puigdemont «ha manifestado públicamente su intención de no comparecer y ha solicitado, junto con Comín y Serret, efectuar la declaración por videoconferencia, sin ofrecer ningún dato sobre su localización actual».

Por todo eso, pidió a la magistrada Carmen Lamela que ordenara su búsqueda, captura y detención tanto a nivel español como internacional, y que haga las gestiones oportunas con las autoridades belgas para emitir Ordenes Europeas de Detención contra los cinco miembros destituidos del Govern que el jueves no se personaron en Madrid.

Bélgica tiene «la obligación» de rechazar la extradición, según un penalista belga

El abogado penalista belga Denis Bosquet, uno de los más prestigiosos en Bruselas, considera que Bélgica tiene «la obligación» de rechazar la extradición del presidente y de los consellers destituidos si no tiene «garantías del respeto de sus derechos fundamentales». En una entrevista a la ACN, ha añadido que los derechos fundamentales que hay que garantizar a Puigdemont es el de un juicio justo y «la ausencia de discriminación» por motivos de «lengua, cultura u opinión política».

Bosquet ha asegurado que, con una orden de arresto europea, Puigdemont y los cuatro consellers destituidos acabarían ante el juez, que tendría que decidir si los envía a España o les permite quedarse en Bélgica. Según el abogado penalista, además de apelar a un posible riesgo por sus derechos fundamentales, Puigdemont también podría justificar su defensa en base a la cual los crímenes de sedición o rebelión no son iguales en los dos países. Bosquet cree que, entonces, el juez podría pensar que hay una «desproporción» en la pena de prisión reclamada para Puigdemont y los consellers. En Bélgica, recuerda, la sedición tiene una condena máxima de 6 meses de prisión, mientras que en España se pueden pedir 15 años.