Mas renuncia a la presidencia del PDeCAT para facilitar «nuevos liderazgos» al partido

Artur Mas ha anunciado este martes por la tarde que dimite como presidente del PDeCAT y da «otro paso al lado». Una decisión que ha asegurado que «no es precipitada sino largamente meditada». De hecho ha explicado que le comentó a Carles Puigdemont antes del verano. Ha justificado la decisión para facilitar «nuevos liderazgos» en el PDeCAT y por el calendario judicial de los próximos meses. El Supremo ratificará previsiblemente su inhabilitación por la consulta del 9-N y este mismo martes ha recibido la notificación del Tribunal Supremo comunicándole que es investigado por la causa ampliada con respecto al 1-O. «No me retiro de la política. Yo sigo vinculado a la política de este país, muy implicado y comprometido. La vida es muy larga, no se sabe qué puede pasar», ha explicado en referencia a su futuro. Además, ha asegurado que la decisión «no implica un mensaje hacia nadie y menos en Puigdemont». Por otra parte, Mas ha desvinculado su decisión con el 'caso Palau', cuya sentencia se conocerá el lunes que viene.

Mas ha justificado que ha decidido hacer pública la decisión justo antes de empezar el nuevo curso político -el 17 de enero se constituye el Parlamento de la duodécima legislatura-, y también ha hecho coincidir el anuncio en este 9 de enero, precisamente dos años después de renunciar a la presidencia de la Generalitat y proponer Puigdemont. El ya expresidente del PDeCAT ha subrayado que renuncia a seguir encabezando -de manera representativa- el partido para dejar paso a «nuevos liderazgos» que puedan canalizar la «nueva etapa» que representan JxCat y el propio PDeCAT. Mas ha aseverado que no quiere ser un «freno» para la expansión que puede tener este proyecto.

Acompañado de su mujer; la coordinadora general del partido, Marta Pascal; el coordinador organizativo, David Bonvehí; la vicepresidenta, Neus Munté; el responsable de Acció Política, Ferran Bel; y el exalcalde y líder del Partit Demòcrata en Barcelona, Xavier Trias, Mas también ha puesto en el foco de su decisión el calendario judicial que tiene que afrontar los próximos meses. Condenado e inhabilidad por haber organizado el 9-N, está pendiente que el Supremo ratifique esta decisión. De hecho, cree que así será. Además, el exjefe del ejecutivo tiene que encarar el proceso del Tribunal de Comptes también por el 9-N.

Por otra parte, Mas ya ha recibido la notificación del Supremo donde lo informa de que es una de las personas investigadas dentro de la causa ampliada del 1-O. El expresidente del PDeCAT, pues, tendrá que ir al TS a declarar una vez se lo cite. Por todo eso, Mas ha apuntado que necesita «más tiempo» para dedicar a todos estos casos judiciales.

«La suma de las tres cosas me señala un camino lleno de dificultades que tendré que encarar», ha argumentado. Y, en este sentido, Mas ha constatado que tendrá poco «margen de maniobra», un escenario que cree que puede perjudicar la consolidación del proyecto de JxCat y el PDeCAT: «No tengo que limitar su acción de expansión», ha reiterado, para después opinar que cree que hacen falta liderazgos que tengan «más margen de maniobra».

'Cas Palau'

Por otra parte, Mas ha desvinculado su decisión con el 'cas Palau', cuya sentencia llegará este lunes por parte del Supremo. Así, ha argumentado que CDC pagó el precio «más alto» que se puede pagar, que es «desaparecer» como partido, y ha recordado que él no ha sido llamado ni como testigo, imputado o investigado en el juicio.

Relación con JxCat

Mas ha negado que haya ninguna confrontación con JxCat, la formación que lidera Carles Puigdemont y en la cual el PDeCAT ha puesto las «bases» para que fuera una fórmula de éxito. El día siguiente de trasladar al Comité Nacional del Partido Demócrata que la implementación de la independencia no se puede «acelerar» porque no se llegó al umbral del 50% de votos, y que sería un error repetir unas elecciones que podrían hacer perder los buenos resultados del 21-D, Mas ha asegurado que no hay ninguna discrepancia con JxCat. Sin embargo, hay que recordar que la «lista del presidente» prefiere repetir comicios en vez de aceptar una alternativa a Puigdemont.

El expresidente de la Generalitat ha insistido en que JxCat nació «de manera común» entre el presidente destituido y el PDeCAT en un encuentro en Bruselas, y ha subrayado que quiere que la fórmula de la primera bastante independentista el 21-D cuaje, se refuerce y se expanda, gracias en parte a la «base» del PDeCAT. «O lo estropeamos o lo reforzamos, y yo estoy decidido para reforzar el proyecto», ha reivindicado.

El liderazgo de Munté

El hasta ahora presidente del PDeCAT ha concluido que hay que dejar «espacios libres» con capacidad de liderazgo que asuman responsabilidades, y señalado que la vicepresidenta del partido y exportavoz del Gobierno, Munté, es quien tiene que asumir la función representativa de la formación.

Carta a la militancia

Mas comunicó a Pascal su decisión este lunes por la mañana, y este martes le ha enviado una carta para oficializar la renuncia al cargo, donde expone los mismos motivos que ha explicado en la rueda de prensa del martes. Además, el expresidente también ha enviado una carta a la militancia del partido, donde reitera que después del 21-D se abre una «oportunidad de oro» para ampliar la base y el alcance del proyecto de JxCat y el PDeCAT.

«Fiel a mis principios de poner el país por delante del partido, y el partido por delante de la persona, he decidido dejar la Presidencia [del PDeCAT] para ayudar a aprovechar mejor las oportunidades del futuro inmediato», dice la carta. Finalmente, Mas asegura que continuará «al pie del cañón» y pide que el resto de simpatizados del Partit Demòcrata mantengan la «militancia activa» con la formación nacionalista.