La jefe de los Mossos defiende que Pérez de los Cobos conocía el dispositivo de los Mossos
Ferran López asegura que la policía catalana cumplió en todo momento los mandamientos judiciales
El comisario jefe de los Mossos, Ferran López, ha defendido este lunes ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena la actuación de los Mossos durante el 1-O, que según ha apuntado dio cumplimiento a los mandatos judiciales. López ha afirmado que el encargado del dispositivo policial del 1-O conocía la planificación de la policía catalana para aquella jornada. Ha contradicho de esta manera la declaración que el coronel Pérez de los Cobos hizo al Tribunal Supremo (que sirvió de base para mantener la prisión para el conseller destituido Joaquim Forn) según la cual los Mossos no informaron correctamente al resto de cuerpos sobre el dispositivo de que pensaban desplegar el 1-O e incluso «vigilaron» los movimientos de la policía española el día del referéndum para «informar» los concentrados de que llenaban los colegios electorales a fin de que se pudieran organizar. Según fuentes jurídicas, durante esta declaración de tres horas López ha recordado que había un único dispositivo de seguridad y que la policía catalana se cuidaba de seguridad ciudadana, mientras que la parte especializada de orden público correspondía a la policía española.
Según estas fuentes, el comisario jefe de los Mossos ha reiterado el contenido de la declaración que ya hizo el viernes en la Audiencia Nacional, donde|dónde aseguró ante la jueza Lamela (que investiga el Mayor Trapero) que no hubo engaño y que Pérez de los Cobos conocía de primera mano el dispositivo que los Mossos habían previsto para el 1-O. Según aquel testimonio, López sabía que los Mossos preveían enviar dos agentes a cada colegio electoral y no puso «ninguna objeción» a este dispositivo.
Su declaración contradice al testimonio del coronel de la Guardia Civil encargado de aquel dispositivo. Diego Pérez de los Cobos afirmó que el día previo al referéndum los Mossos también fueron a los puntos de votación para decir que volverían al día siguiente a las 6h de la mañana y que, si había gente, no desalojarían. Además afirmó que la policía catalana actuó en esta dirección cumpliendo las órdenes de la cúpula de interior, es decir, del Mayor de los Mossos, el mayor Josep Lluís Trapero, y del conseller destituido Joaquim Forn. También se negó a aceptar la cifra de 1.066 heridos y dijo que se trataba «de asistencias médicas que hay que revisar» y que «muchas eran falsas».
Después de aquella declaración Llarena decidió mantener Horno en la prisión aduciendo que había riesgo de reiteración delictiva en un auto donde al juez lo señalaba como responsable de «la inacción» de los Mossos el día del referéndum. La defensa de Forn, por el contrario, pidió que se llamara a declarar como testigos la cúpula actuales de los Mossos para desmentir unas afirmaciones «radicalmente inexactas» de Pérez de los Cobos.
López ha comparecido ante Llarena como testigo a petición de la defensa de Joaquim Forn, que pidió a los testigos de la actual cúpula de los Mossos para desmentir las afirmaciones «radicalmente inexactas» de Pérez de los Cobos. Después del comisario jefe declaran también el jefe de la comisaría superior de coordinación central de los Mossos, Juan Carlos Molinero, y el jefe de la Comisaría General Técnica de Planificación de la Seguridad, Emilio Quevedo. El juez también ha citado para mañana el martes al jefe de la Comisaría General de Información, Manuel Castellví, y dos mandos más presentes en los registros de los días 20 y 21 de septiembre, estos dos últimos a petición de la defensa del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart.