La diplomacia española «refuerza» su campaña exterior para contrarrestar el interés por Puigdemont
Un grupo de 17 embajadores españoles en países de la UE y Suiza trataron la situación catalana en una reunión con el Secretario de Estado de Asuntos Europeos
La diplomacia española «refuerza» estos días su «tarea explicativa» en el exterior para contrarrestar el interés internacional en el caso de Carles Puigdemont después de que la justicia alemana desestimara el delito de rebelión y lo dejara en libertad. Así lo han confirmado al ACN fuentes del Ministerio de Exteriores, que aseguran que las embajadas ya hacían de forma «habitual» difusión de la posición del gobierno español sobre Cataluña, pero que ahora intensifican esfuerzos. De hecho, un grupo de 17 embajadores españoles en países de la Unión Europea y Suiza trataron la situación catalana y como contrarrestar los mensajes críticos con el Estado en una reunión el lunes por la noche en Alicante con el Secretario de Estado de Asuntos Europeos, Jorge Toledo. El encuentro ya estaba previsto porque los diplomáticos se encontraban para unas conferencias sobre el Brexit y el Mediterráneo, pero se aprovechó para discutir sobre Cataluña.
Una muestra de la campaña de la diplomacia española contra los mensajes favorables a Puigdemont que han surgido estos días en Alemania es la carta que ha enviado a la embajadora española en Berlín, María Victoria Morera, al diario Suddeutsche Zeitung.
El rotativo publicó durante el fin de semana unas declaraciones de la ministra de Justicia alemana, Katarina Barley, asegurando que la liberación de Puigdemont era «absolutamente correcta», pero el gobierno alemán aseguró después de las quejas de Madrid que sus palabras habían sido un «malentendido» y que Barley no había hecho ninguna entrevista «autorizada».
Aunque han aparecido varios artículos a la prensa alemana a favor de la mediación europea entre Cataluña y España y el diálogo, fuentes del ministerio de Exteriores aseguran que la «mayoría» de los mensajes son partidarios de las tesis «constitucionalistas» del Estado. Con todo admiten que hay preocupación, a Madrid, por la creciente difusión de las tesis independentistas en el exterior. De hecho, desde el gobierno español hay quien considera que Puigdemont y el resto de consellers han ganado, por ahora, la campaña mediática a fuera.
La diplomacia española admite que el proceso se ve con ojos diferentes dependiendo de los países. En el caso de Escocia, por ejemplo, donde lucha contra su extradición la consellera cesada Clara Ponsatí, el apoyo para los independentistas es más fuerte. El embajador español en el Reino Unido, Carlos Bastarreche, publicó recientemente una carta al director en el The Times para defender la «separación de poderes» a España y el proceso judicial contra los independentistas. En Finlandia, el diputado del Partido de Centro Mikko Kärna, que invitó a Puigdemont al parlamento, denunció que el embajador español en Helsinki se ha quejado a la cámara por la invitación al líder de JxCat.