Junqueras defiende delante de Llarena el derecho a la autodeterminación y que convocar un referéndum «no es delito»
El vicepresidente destituido asegura que no se ha destinado «ni un céntimo» para el 1-O y que «no toleraron ni promovieron» ninguna acción violenta
Junqueras asegura delante de Llarena que no se ha destinado «ni un euro del presupuesto al proceso»
La declaración indagatoria de Oriol Junqueras ante el Tribunal Supremo ha durado unos 40 minutos y el vicepresidente destituido sólo ha respondido a las preguntas de su letrado, Andreu van den Eynde. Según fuentes presentes en la declaración, Junqueras ha defendido el derecho a la autodeterminación y que convocar un referéndum no es delito. Además, también ha asegurado que no se ha destinado «ni un céntimo» a la organización del 1-O y también se ha referido a la violencia policial de aquel día. Ha afirmado delante el juez que fue «intolerable» y ha defendido que nunca va «ni promover ni tolerar ni asumido como posible» ninguna acción violenta desde el Gobierno para asumir sus fines posibles. Después de Junqueras, ha empezado la declaración indagatoria de Jordi Sànchez. El último al comparecer ante el juez será Jordi Cuixart. Por primera vez, en la sala también está el abogado de Carles Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas, después de que Llarena haya dejado al presidente destituido personarse a la causa.La declaración indagatoria ha durado unos 40 minutos y Junqueras ha podido exponer su posicionamiento delante de Llarena. A preguntas de su letrado, ha defendido que ERC hace décadas que defiende un programa independentista y que nunca antes se había cuestionado.
En esta línea, ha enmarcado en la política el conflicto catalán y ha dicho que siempre se tendría que haber defendido desde la política y no llevarlo ante los juez ni mucho menos criminalizarlo». Además, Junqueras ha defendido el derecho a la autodeterminación de Cataluña y que defender la independencia y promoverla es legal.
Asimismo, y según estas fuentes, el vicepresidente destituido ha defendido su carácter pacifista y también se ha referido a los intentos de buscar un acuerdo con el Estado, que no fueron exitosos. En esta línea, ha negado que haya existido violencia y ha afirmado que desde el Gobierno «ni se promovió, ni tolerado ni asumido como posible» una actuación violenta para conseguir las finalidades independentistas.
Niega la malversación
Junqueras también ha negado la malversación y ha asegurado que no se ha destinado ni un «céntimo» a la organización del referéndum. Sobre el 1-O, ha asegurado que era una votación masiva que no se podía reprimir por la fuerza y, por eso, ha criticado la violencia ejercida por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Según estas fuentes, habría dicho que es «inadmisible». A preguntas de su letrado, también ha defendido que convocar el referéndum no era delito.
También ha expuesto quejas sobre el procedimiento judicial, ya que ha alegado que no tendría que estar juzgado en el Supremo sino en el TSJC por poder tener así la opción que su sentencia pueda estar revisada por un estamento superior. Además, ha expresado las dificultades que tiene por|para preparar desde la prisión su estrategia de defensa.
Vulneración de derechos
Otra de las quejas del vicepresidente destituido expresada delante de Llarena ha sido que el proceso judicial quiere anular un movimiento político y que está recortando derecho político. En consecuencia de todo, ha expresado que no considera que su procesamiento se ajuste a la legalidad.
