Cuixart pide el traslado a una prisión catalana
Registra un escrito ante Instituciones Penitenciarias dónde denuncia la vulneración de derechos, entre ellos los de su hijo de un año
El presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, ha registrado este lunes un escrito delante de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias –que depende del Ministerio del Interior- para solicitar el traslado a una prisión catalana, según ha confirmado la ACN. Cuixart es el primero en dar el paso, en una estrategia coordinada por varias defensas. La previsión es que, próximamente, el resto de presos preventivos del proceso sigan el mismo camino. El escrito, presentado por el abogado Carlos Garcia Castaño –experto en derecho penitenciario- sostiene que mantenerlo recluido a una prisión madrileña ahora que ya se ha acabado la instrucción vulnera tanto el derecho a la vida familiar y la intimidad (recogido en la Constitución española), así como el derecho de los niños a relacionarse con el padre, recogido a la Convención de los Derechos de los Niños de las Naciones Unidas. Ahora, desde Instituciones Penitenciarías tendrán que consultar al juez instructor del Supremo, Pablo Llarena, cuál es su opinión. Aunque su decisión no es vinculante, fuentes del organismo apuntan que es el criterio del juez el que se acaba imponiendo.
Diferentes defensas de los nueve encarcelados del proceso hace tiempo que trabajan en un nuevo objetivo común: conseguir el traslado a prisiones catalanas. Lo hacen aprovechando que la instrucción por parte del juez del Supremo Pablo Llarena está prácticamente acabada y que ya les ha comunicado formalmente el procesamiento por rebelión (en el caso de los miembros del Gobierno, también por malversación). Por lo tanto, los abogados entienden que ya no los tendrán que citar para ponerlos a disposición del Tribunal Supremo hasta el día del juicio.
Este tipo de traslados no son habituales cuando los presos no han sido todavía condenados pero las defensas denuncian que, con la instrucción acabada, mantenerlos recluidos a 700 km de casa y lejos de la familia y sus abogados es una vulneración de derechos. Muchos de los encarcelados tienen hijos menores y, en el caso de Dolor Bassa y Carme Forcadell, nietos pequeños.
Jordi Cuixart, el primero en dar el paso
El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha sido el primero en dar el paso y ya ha registrado ante Instituciones Penitenciarias el escrito dónde solicita el traslado. La asesora el abogado Carlos Garcia Castaño, que ha registrado un escrito este lunes apelando a la legislación vigente que establece el criterio de «máxima proximidad del interno a su hogar para evitar el desarraigo».
Además, acompaña la petición con dos dictámenes elaborados por el director del Observatorio del Sistema Penal y Derechos Humanos de la Universidad de Barcelona, Iñaki Rivera Beiras, y el abogado Albert Parés, premio de Derechos Humanos del Consejo General de la Abogacía española.
Vulneración de derechos
El abogado fundamenta la petición en tres ámbitos. Por una parte, considera que mantener Cuixart recluido en Soto del Real (es desde el 16 de octubre de 2016) vulnera el derecho a la vida familiar y la intimidad, recogido en el artículo 18/1 de la Constitución.
Asimismo, también asegura que se están vulnerando los derechos del suyo hijos, de un año de edad y que cada vez que tiene que visitar el padre tiene que hacer más de 1.400 km. Según el letrado, eso le provoca efectos «físicos y emocionales». En el escrito, hace referencia a la Convención de los Derechos de los Niños de las Naciones Unidas, firmada por España, y subrayado que el texto obliga a los estados a respetar el derecho del niño que, a pesar de estar separado de uno de sus progenitores, tiene que poder mantener «relaciones y contacto directo de manera regular».
Por otra parte, el letrado entiende que la lejanía de Cuixart de su domicilio también afecta a su derecho a la defensa. Su abogada, Maria Roig, se tiene que trasladar hasta Madrid para poder preparar con Cuixart todas las vistas y pasos que se van dando en este procedimiento. Entiende, pues, que una vez acabada la fase de instrucción y dictada el auto de procesamiento tiene que poder estar a una prisión más próxima que permita a su abogada tener acceso más ágil y fluido con su cliente para preparar el juicio, todavía sin fecha.
La compañera de Jordi Cuixart, Txell Bonet, ya denunció esta situación ante la ONU en una conferencia el pasado 20 de marzo. Entonces, ya defendió que las Naciones Unidas han reconocido la primacía del derecho de los niños a tener una familia y como la prisión preventiva vulnera este derecho. Puso de relieve los efectos «físicos y emocionales» que tiene para los niños –especialmente los menores de 5 años- no crecer en un ambiente familiar normalizado.
El criterio del juez, lo que impera
El escrito se ha registrado delante de la Secretaría General de Insitucions Penitenciarias, un organismo que depende del Ministerio del Interior con Juan Ignacio Zoido al frente. Sin embargo, este organismo siempre mujer traslado de este tipo de escritos a los jueces competentes de cada caso. Según fuentes consultadas por la ACN, aunque su criterio no es vinculante, la decisión de que acaba tomando Instituciones Penitenciarias va en la línea marcada por el juez.
Habrá que ver si en este caso, el juez del Supremo se muestra más flexible, ya que este tipo de traslados no son habituales. Un ejemplo es el caso de Sandro Rosell, encarcelado en Soto del Real por orden de la Audiencia Nacional desde hace más de 300 días por un delito de blanqueo de capitales. El expresidente del Barça también ha pedido el traslado a la espera de ser juzgado pero también se le ha denegado.
Presos preventivos con hijos pequeños
Aparte de Cuixart, esta situación se repite en la gran mayoría de los presos preventivos del proceso. El número 2 de JxCat y exlíder de la ANC, Jordi Sànchez, también tiene dos hijas menores de edad. También tiene dos hijos pequeños es el vicepresidente destituido, Oriol Junqueras. Precisamente, este mes de abril su hija pequeña ha hecho 3 años y la felicitó a través de un mensaje en Twitter. Raül Romeva también está en esta situación ya que tiene una niña de 11 años y un niño de unos 7 años.
Se repite el caso con Josep Rull, que tiene dos niños pequeños (de 3 y 7 años aproximadamente). El mismo Rull escribía en Twitter la semana pasada después de la visita de sus hijos: 'Después de 21 días hoy he podido volver a acariciar a mis dos hijos. Felicidad llena con un despido durísimo. Comeos a besos vuestros menores, no os dejéis perder ningún momento mágico de sus vidas'. Asimismo, Dolors Bassa y Carme Forcadell tienen dos nietos pequeños.
Peticiones anteriores
En enero, el abogado de Junqueras, Andreu van den Eynde, ya pidió el «traslado urgente» del vicepresidente destituido a una prisión catalana y ya apuntaba que la que estaba más cerca de su municipio era la de Brians 1. En el mismo escrito, también pedía permisos penitenciarios para Junqueras para asistir al pleno de constitución de Parlament y al primer debate de investidura planteado para el 30 de enero. El juez Pablo Llarena denegó las dos peticiones.
En aquel escrito ya se hacía referencia a las conocidas como 'Reglas Nelson Mandela', que constituyen las reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos en los estados miembros. Ya se apuntaba entonces que así podría estar más cerca de su familia y sus hijos menores.
A finales de octubre, los letrados de Jordi Sànchez y Jordi Cuixart también anunciaron que solicitarían en la Audiencia Nacional el traslado a una prisión catalana.