JxCat se prepara para activar el cuarto candidato e investirlo la semana que viene

JxCat ya se prepara para activar el cuarto candidato a la investidura. Después de que el Tribunal Constitucional (TC) haya admitido a trámite esta el miércoles tarda el recurso del gobierno español contra la ley de Presidencia, la formación que lidera Carles Puigdemont aborda, ahora sí, el llamado plan D. La intención de JxCat es investir a este cuarto candidato la semana que viene. La formación independentista mayoritaria apuesta por dar la primera vuelta lunes 14 y, si hiciera falta -todo apunta que será así-, una segunda vuelta el miércoles 16. Ahora que el TC ya ha cerrado la puerta definitiva en Puigdemont, se espera que el presidente destituido anuncie el nombre del cuarto candidato entre el viernes y sábado -más probable- en una intervención desde la capital alemana, que no se espera que sea abierta a la prensa. Sobre la mesa sigue sonando con fuerza la portavoz del grupo, Elsa Artadi; el diputado Toni Morral; el vicepresidente primero de la Mesa, Josep Costa; así como de otros. Puigdemont también podría apostar por algún alcalde de la lista como presidente «provisional».

Ahora que la ley de Presidencia ha quedado suspendida cautelarmente, el escenario obliga JxCat a abordar el plan D sin más dilataciones. De aquí 13 días se agotará el plazo para investir a un presidente y convocar elecciones de forma automática. Así, el grupo independentista mayoritario se apresura para terminar la investidura la semana que viene. JxCat apuesta por empezar el pleno lunes 14 y acabarlo el 16, dando por hecho que el cuarto candidato no tendrá bastantes apoyos para ser investido en primera vuelta -donde hace falta mayoría absoluta-, ya que la CUP no se plantea cambiar sus cuatro abstenciones. De esta manera se cumplirían los plazos que anunció JxCat después de la reunión del sábado en Berlín con Puigdemont, dónde el grupo aseguró que el objetivo era hacer la investidura el día 14, como a tarde. Por su parte, a algunos sectores de Esquerra -así como el entorno del presidente del Parlament, Roger Torrent- les parecería bien empezar la investidura sábado 12 y acabarla el 14, para no arriesgar con el voto delegado de Toni Comín.

El peligro de llevar la segunda vuelta de la investidura al día 16 es que, aquel miércoles, el juez belga resolverá el caso de las euroórdenes contra Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig. El voto delegado del conseller de Salud destituido es clave para sumar más síes que noes en la segunda vuelta de la investidura, de manera que la mayoría peligraría en caso de que la justicia belga sacara todos los cargos contra Comín. De esta manera la petición de su voto delegado podría decaer.

Antes de la investidura, el número dos de JxCat, Jordi Sànchez -encarcelado en Soto del Real desde hace más de medio año-, tendría que renunciar a su candidatura para dar paso al cuarto nombre. Acto seguido, Torrent abriría ronda de contactos -se calcula que el fin de semana- con los grupos parlamentarios para escuchar propuestas de nombres. Será entonces cuando Torrent anuncie la quinta sesión de investidura, al constatar que el plan D de JxCat es quien tiene más apoyos.

Baile de nombres

Con respecto a los nombres, continúa la incógnita como valor predominante. Artadi se mantiene en las quinielas desde el inicio. Aunque en público y en privado la portavoz de JxCat se ha autodescartado reiteradamente, hay que apuntar que en las dos últimas entrevistas radiofónicas de los últimos días se ha limitado a decir que todos los diputados del grupo están al servicio de Puigdemont. El nombre de Morral también aparece como futurible candidato. Se trata de un hombre próximo a Sànchez, exsecretario nacional de l'ANC, exalcalde de Cerdanyola del Vallès, con carné de ICV de 1987 en el 2015. Morral fue uno de los impulsores de la agrupación de electores para hacer una lista unitaria el 21-D.

También aparece como posible candidato Costa, hombre con un perfil más técnico y estratega jurídico de Puigdemont. A lo largo de los meses también han sonado nombres como los independientes Quim Torra y Laura Borràs, o dirigentes con carné del PDeCAT, como los alcaldes Marc Solsona y Marta Madrenas. Sea como sea, JxCat insiste en que el plan D será un presidente «provisional», para mantener la «legitimidad» de Puigdemont en el exilio. De hecho, la formación asegura que volverá a intentar investir al presidente destituido a lo largo de la legislatura.

El artículo quinto de la ley de Presidencia estipula que el presidente o presidenta de la Generalitat, una vez investido por el Parlament, es nombrado por el rey español a propuesta del presidente del Parlament. La decisión se publica en el Diario Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) y tiene efectos a partir de la toma de posesión, que tiene que tener lugar en el plazo de cinco días a partir del nombramiento. Así pues, y después de siete meses, cuatro candidatos y cinco investiduras, Cataluña podría volver a tener presidente y Gobierno a partir de la semana que viene.