Manifestación multitudinaria en la Diagonal para reclamar la República y la libertad de los presos

Una multitud de gente ha llenado este martes la Diagonal de Barcelona para reclamar la República y la liberación de los políticos independentistas tomados en el marco de la concentración de la Festividad por la República Catalana convocada por l'ANC y Òmnium. La Guardia Urbana de la capital catalana ha cifrado la concentración en en torno a un millón de personas, que han llenado a rebosar los seis kilómetros de recorrido entre la Plaza de las Glorias y el Palacio Real.

El rasgo distintivo de la concentración de este año ha sido la representación de una ola de sonido que ha recorrido todo el tramo hasta llegar a la cabecera del acontecimiento, donde ha tumbado un muro de atrezzo de grandes dimensiones instalado en el escenario del Palacio Real que hacía referencia a los obstáculos superados y a superar para hacer efectiva la República catalana.

Sobre las tres y media de la tarde, casi dos horas antes de la hora oficial de inicio de la concentración, la Diagonal de Barcelona empezaba a llenarse de gente. Varias calles del Eixample acogían largas hileras de autocares aparcados, los centenares de vehículos que han traído a gente de toda Cataluña.

A aquella hora la organización pedía a los participantes que se colocaran en sus tramos -entre el 0 y el 37– para que puntualmente a las 17.14 h pudiera empezar la ola de sonido, el rasgo distintivo de la concentración de este año. Unos 6 kilómetros de recorrido que poco antes del arranque oficial del acto estaban llenos a tope de punta a punta, desde la Plaza de las Glorias hasta el Palacio Real.

Minutos antes de las 17.14 h un grupo de gralleros ha interpretado el toque de maitines desde el tramo 37 e instantes después se ha hecho silencio a la Diagonal. El actor Toni Albà ha sido el encargado de dar la bienvenida y hacer el anuncio del toque. Los concentrados también han bajado las pancartas y banderas.

A la hora señalada, el chasquido de un cohete ha roto el silencio en el tramo 37 y ha generado una gran ola sonora que ha avanzado y crecido progresivamente hasta llegar al tramo 0, entre las pancartas y los carteles que los asistentes han alzado cuando la ola ha pasado por su zona.

Cuando la ola ha llegado al escenario, se ha hecho caer un muro de atrezzo de grandes dimensiones instalado en el escenario del Palacio Real, que hacía referencia a los obstáculos superados y a superar para hacer efectiva a la República catalana.

El muro estaba formado por una infraestructura metálica donde había representados el rey Felipe VI, una rueda de hámster y el 155. Varios actores han sacudido el muro y han empezado a girar algunas de sus piezas bajo los gritos de «Independencia» «Ni un paso atrás», «Siempre firmes» o «Las calles serán siempre nuestras».

Una vez se ha tumbado el muro, ha habido varios parlamentos en defensa del anhelo independentista de alcanzar una república catalana y en defensa de los políticos encarcelados y exiliados. Uno de los tonos más reivindicativos ha sido el de la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, que ha pedido al Gobierno que se vuelva a preparar para un «embate» y que no implore permisos «que no llegarán nunca».

El vicepresidente de Òmnium Cultural, Melcior Mauri, se ha dirigido a los políticos independentistas para pedirles «sentido de estado; unidad, que no quiere decir uniformidad; rigor; firmeza y que la determinación demostrada a la Diagonal se transforme en acción política».

De su lado, el presidente de la Asociación de Municipios por la Independencia (AME), Josep Maria Cervera, ha denunciado la «feroz persecución del Estado español» contra el independentismo.

También han hablado los abogados de presos y «exiliados», Aamer Anwar y Ben Emmerson, que han pedido la libertad de los líderes independentistas, para poder negociar una solución política al conflicto catalán.

Además, ha intervenido la madre de Adrià Carrasco –el joven del CDR de Cuevas «exiliado» en Bélgica-, Núria Tarrés, que ha asegurado que su hijo se ha tenido que marchar a Bruselas «buscando la seguridad y la justicia que aquí no tiene».

Sobre las seis y media de la tarde los participantes a la Festividad para|por la República han empezado a abandonar la Diagonal de Barcelona después de que se haya puesto punto y final al acto. El canto deLos Segador s en el escenario principal ubicado en el Palacio Real ha marcado la finalización de la Festividad.