Aragonés: «Si Sánchez quiere un gobierno español estable, que se siente a negociar el futuro político de Cataluña»

El vicepresidente del Gobierno de la Generalitat, Pere Aragonès, ha asegurado este domingo que si el gobierno español quiere garantizar su estabilidad, «tiene que afrontar una negociación política sobre el futuro de Cataluña», el cual «sólo lo podrá decidir su gente». Aragonés, que estos días hace de presidente en funciones por el viaje a los EE.UU. del presidente Quim Torra, ha dicho que no es «imposible» que ERC y PDeCAT voten en contra de los presupuestos españoles como sugirió este sábado el líder del PSC, a Miquel Iceta. Según el vicepresidente, lo «imposible es que desaparezcan los dos millones de independentistas». En un acto municipalista en Sant Vicenç dels Horts, población del expresidente del Gobierno Oriol Junqueras, se ha leído una carta suya en la cual insiste en seguir forjando una «mayoría imparable» a favor de la independencia.

Junqueras, que fue alcalde de la ciudad durante más de cuatro años, ha situado el Área Metropolitana de Barcelona como pieza clave de Cataluña con el fin de poder «vencer». Con la mirada puesta en las elecciones municipales, el exvicepresidente ha asegurado que hay que saberse alzar como una fuerza democrática y republicana al servicio de los vecinos», y ha reiterado que para hacer posible a la República Catalana hace falta «persuadir» y «convencer». La carta ha sido leída por la actual alcaldesa de Sant Vicenç dels Horts y candidata a la reelección Maite Aymerich, que ha destacado que el líder republicano ha devuelto a sus habitantes «el orgullo» de ser de la ciudad.

En la línea de Junqueras se ha expresado su sucesor al ejecutivo, Pere Aragonès, que ha considerado que en las municipales los independentistas «tienen que ser fuertes en los lugares donde históricamente no han tenido tanta fuerza» porque «es allí donde se ganan las mayorías». En este sentido, ha asegurado que «la República sólo tiene sentido si es para todo el mundo», ya que, según él, eso no va «sólo de cambiar de pasaporte o de bandera» sino «construir un estado que no esté al servicio de los grandes intereses económicos sino de su gente». Este mensaje también lo ha hecho suyo la consellera de Justicia, Ester Capella, que ha intervenido en el acto para dejar claro que «nunca» renunciarán al derecho de autodeterminación pero que para ejercerlo «hay que ser muchos» y «no dejar a nadie atrás». «Hay que hacer de nuestra existencia diaria un acto de rebeldía», ha añadido.

Sobre el proceso judicial del 1-O, Aragonès ha tildado de «insólito» que «se permita que un partido de extrema derecha como Vox sea la acusación popular». «Son ellos los que se tendrían que sentar en los banquillos de los acusados, no ser los acusadores», ha exclamado. En este sentido, ha criticado que el gobierno del PSOE lance a los independentistas que si no aprueban los presupuestos del Estado «vendrá la extrema derecha». «Ya la tenemos aquí como acusación popular de los políticos y activistas independentistas procesados». Con la mirada puesta en el juicio el vicepresidente también ha hecho un llamamiento a la «movilización y determinación» porque, según su opinión, «se juzga todo un país que se movilizó el 1-O y que continúa movilizado». «Vienen meses complejos pero se volverá a demostrar la determinación y voluntad de construir un país libre», ha sentenciado.