Reabren la causa contra los acompañantes de Puigdemont cuando lo detuvieron en Alemania
Acepta un recurso de la fiscalía y revoca el archivo dictado por el juez Diego De Egea
El juez Diego de Egeaabrió una causa para investigarlos en los cuatro por encubrimiento y los citó a declarar en la Audiencia Nacional. Todos se presentaron ante el juez el 4 de junio, a excepción de Josep Maria Matamala que reside en Bélgica y a quien la Audiencia Nacional no pudo notificar la citación.
Después de las comparecencias de los dos Mossos d'Esquadra y del historiador Josep Lluís Alay, el juez De Egeadecidió archivar el caso. En su auto de 30 de octubre, el juez argumentaba que los dos agentes se encontraban de permiso de sus funciones. Además, apuntaba que Alay no tenía condición de funcionario público (todavía no dirigía la oficina del expresidente) y, por lo tanto, los tres se encontraban fuera del ejercicio de sus funciones públicas.
La detención se produjo el 25 de marzo, dos días después de que el juez Pablo Llarena procesara a los encausados por el 1-O (incluido Puigdemont) y reactivara las órdenes internacionales de detención contra los que se encontraban en el extranjero. Puigdemont volvía en coche desde Finlandia, donde había estado pronunciando algunas conferencias y participando en actos. De Egeaentendía que los acompañantes de Puigdemont podían no conocer este hecho y defendía que para cometer el delito hay que tener «conocimiento de la comisión del delito previo». «No se incurre en este delito, pues, cuando los hechos se cometen porimprudencia, descuido o negligencia», concluía.
En el caso de Josep Maria Matamala, el juez optaba por preguntar en la fiscalía si quería dictar orden de búsqueda internacional, detención y presentación, ya que es lo único de los cuatro que no se había presentado a declarar.
Cambio de criterio
El ministerio público recurrió el archivamiento dictado por De Egeay ahora la sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le da la razón. En el auto dictado por tres magistrado, ordena que el caso se reabra y daargumentos. En su recurso, la fiscalía ya remarcaba que la activación de la euroorden era un «hecho notorio» y que, por lo tanto, los acompañantestenían que tener conocimiento.
Por una parte, entiende que los cuatro investigados «tuvieron que conocer la situación del huido de la justicia [en referencia a Puigdemont]» en el momento que lo acompañaban en el viaje de vuelta hasta Bélgica, donde residía.
Por otra parte, considera que la conducta de los investigados «encaja con ayudarlo a eludir la investigación y sustraerse de la busca y captura». Consideran que «necesariamente» todos tenían que conocer que Puigdemont «era uno huido de la justicia». «Toda contribución con el señor Puigdemont para seguir eludiendo su enjuiciamiento en España presenta, cuando menos de manera indiciaria en esta fase de instrucción, indicios suficientes porla comisión del delito de encubrimiento», recoge el auto.
Objetivo: evitar la detención antes de llegar a Bélgica
Además, la sala entiende que optaron por hacer un «inusual trayecto» de más 2.000km en coche para llegar a Bélgica. Según los jueces, eso indica que perseguían la finalidad de «dificultad la posible detención de Puigdemont en su vuelta a Bélgica». «Es difícil imaginar otro motivo para hacer un viaje tan prolongado, incómodo e incluso arriesgado, cuando estaban a disposición de todos ellos sistemas más rápidos, cómodos y seguros», apuntan a la resolución.
En todo momento, apuntan que los cuatro eran «conscientes» de que estaban colaborando para «prestar auxilio» a Puigdemont, y evitar que fuera detenido en un país que no fuera Bélgica.
El juez De Egeaya no está a la Audiencia Nacional y este caso le tocará ahora a su sustituto, Manuel García Castellón. Se prevé que el juez vuelva a citarlos a declarar.