Pérez de los Cobos: «Las dudas sobre la actuación de los Mossos estaban desde hacía mucho, las tenía toda la sociedad»

El coordinador del operativo policial del 1-O, el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, ha explicado que tenía recelos sobre la actuación de los Mossos ya de antes de la convocatoria del 1-O. «Las dudas sobre la actuación de los Mossos estaban desde hacía mucho de tiempo, los tenía toda la sociedad», ha explicado. El coronel ha relatado que la relación con el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero (investigado en la Audiencia Nacional) fue siempre «difícil y tensa» porque vio como una «injerencia» su nombramiento por parte del fiscal jefe de Cataluña y así lo manifestó en varias ocasiones. También ha dicho que la actuación de Trapero iba en la línea de los planteamientos públicos que hacía el exconseller de Interior Joaquim Forn.

Durante su interrogatorio y a preguntas de la fiscal Consuelo Madrigal, el coronel ha explicado que el fiscal jefe de Cataluña lo designó coordinador del operativo policial el 21 de septiembre y que el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, mostró la «disconformidad». «Lo entendía como una injerencia, una invasión de competencias y como un establecimiento de algún tipo de autoridad por encima suyo», ha explicado De los Cobos, que ha aclarado que no era así porque la dirección del operativo la llevaría él y su función era la de coordinar el operativo conjunto entre Mossos, Guardia Civil y Policía Nacional. «El fiscal diferencia entre mando y coordinación», ha explicado.

Críticas en el plan operativo de los Mossos

De los Cobos ha explicado que dos días más tarde –en una reunión del día 23- dijo a Trapero que el plan operativo de los Mossos «no estaba diseñado para impedir el referéndum» y que él le replicó –delante del fiscal- que no le reconocía su autoridad. Entonces, según el coronel, fue el propio fiscal José Maria Romero de Tejada quien le pidió que lo cambiara. «Cuando le dijo el fiscal dijo que sí que incrementaría el personal», ha explicado.

Relaciona Trapero con Forn

En respuestas a la fiscal Consuelo Madrigal, Pérez de los Cobos ha dicho que Trapero ya conocía la mañana del 23 de septiembre la carta que el día antes el conseller de Interior, Joaquim Forn, envió al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, trasladándole que no hacía falta ningún apoyo de los cuerpos policiales estatales y que los Mossos tenía capacidad suficiente para «afrontar la situación». «Interpreto que Trapero ya conocía en profundidad el contenido de esta carta», ha dicho.

Además, también ha señalado que, a la salida de la misma reunión del día 23, Forn compareció poco después ante los medios de comunicación y que le «sorprendió» que explicara el contenido del encuentro. Y ha remarcado que días después, el día 27, Trapero pide en una reunión con la fiscalía que Pérez de los Cobos fuera revocado de su cargo utilizando «los mismos argumentos que utilizó Forn en su comparecencia pública».

Relación «difícil» con Trapero

El coronel ha calificado de «difícil» la relación con el mayor de los Mossos d'Esquadra, hasta el punto que en una reunión convocada por él para el día 25 de septiembre no se presentó. Trapero envió al comisario Ferran López, ha recordado Pérez de los Cobos. Una vez aplicado el 155, López sustituyó Trapero al frente de la prefectura de la policía catalana.

Pérez de los Cobos ha relatado el contenido de reuniones para cumplir con las instrucciones de la fiscalía previos al auto de la magistrada del TSJC. Ha explicado, por ejemplo, que fueron las fuerzas de seguridad del Estado los que facilitaron a Trapero la lista de los locales dónde se preveía votar el 1-O, y que Mossos decía que no tenía. O que el mayor preguntó a fiscalía cuáles eran los «umbrales de permisividad» y que «se definieran bien los criterios». «A ver si habrá 4 individuos votando en una plaza en una caja de zapatos y también lo tenemos que impedir», dijo Trapero, según el coronel.

También ha explicado que el día 27 está el auto de la magistrada Mercedes de Armas y que interpreta que no derogaba las instrucciones anteriores de la fiscalía sino ordena al fiscal cesar en sus actuaciones. Ha explicado que a él no se le notificó y que sólo le facilitaron la parte dispositiva (ocupaba sólo una hoja). En esta parte no constaba, pues, la referencia de la magistrada sobre la obligación de mantener la convivencia en todo momento.

Junta de Seguridad «kafkiana»

Como hizo Nieto en su declaración como testigo, Pérez delosCobos ha calificado de «kafkiana» la convocatoria de la Junta de Seguridad, «con menos de 24 horas de tiempo y con un único punto de la orden» con un título «surrealista», puesto que hacía referencia a cómo se tenían que coordinador las fuerzas de seguridad «para el referéndum de autodeterminación, que era una actividad declarada ilegal». Ha descrito que el ambiente de la reunión era «tenso» porqué en la mesa estaban sentados «los convocantes de la actividad ilegal que teníamos que impedir».

La primera «sorpresa» para él fue la presencia deTrapero, «que no forma parte de la Junta», y a que, a pesar de que tenía sobre su mesa «la misma interlocutoria» que ellos, «no solo no asiste cuando tenía una oportunidad de oro de no ir, sino que hace intervenciones en la misma línea que los convocantes» del referéndum. También ha explicado queTraperoalertó que no se podía provocar «un mal mayor del que se pensaba evitar».

Pérez delosCobos ha explicado que Carles Puigdemont «se agarraba cómo en un clavo al rojo vivo» a la apelación de la magistrada a no alterar la «normal convivencia ciudadana» en las acciones para impedir el referéndum. «Dijo que la convivencia ciudadanía era un bien supremo», ha asegurado. El coronel ha añadido que el gobierno español pidió al presidente que desconvocara el referéndum si querían evitar que hubiera problemas de orden público, al que respondió que «ya sabía lo que tenía que hacer».