López afirma que Puigdemont dijo que declararía la independencia si el 1-O había «incidentes»

El comisario de los Mossos d'Esquadra Ferran López ha asegurado en el Tribunal Supremo que la prefecturadel cuerpo avisó al Govern de que era «más que seguro» que el 1-O habría «incidentes». La advertencia se hizo en una reunión en el Palau de la Generalitat el 28 de septiembre con la presencia del expresidente Carles Puigdemont, el exvicepresidente Oriol Junqueras y el exconseller de Interior Joaquim Forn. Según ha explicado en su declaración ante el Tribunal Supremo, Puigdemont respondió a esta advertencia diciendo que, si se producía el escenario que los Mossos preveían, «declararía la independencia». López, que ha dicho que la policía catalana se encontró en una situación de «desampara gubernativa», ha revelado que el mismo 28 por la noche se reunió con el coordinador Diego Pérez de los Cobos para explicarle el contenido del encuentro con el ejecutivo y de las advertencias que los habían hecho, para evitar «malentendidos» sobre la posición de los Mossos.

En respuestas a la acusación popular representada por Vox y a la fiscalía, López ha hablado sobre las reuniones en el Palau de la Generalitat sobre las cuales ya había declarado el mayor Josep Lluís Trapero también en el Supremo. Hubo una primera el 26 de septiembre, con su presencia, del mayor Trapero, del comisario Joan Carles Molinero, el expresidente Carles Puigdemont y el exconseller Forn. López ha dicho que el objetivo de la reunión «no era comunicar que íbamos a cumplir el mandato judicial», porque «se daba por descontado». El objetivo era «transmitir la preocupación» por el «clima generado en Cataluña aquellos días, de tensión social, de punto de efervescencia, de cuenta atrás al 1-O», ha relatado.

El comisario ha dicho que se quería explicar directamente al presidente «sin intermediarios», pero que aquel día no recibió ninguna «respuesta formal» ni por parte de Puigdemont ni por parte de Forn. «Salimos pesimistas de la reunión», ha dicho.

La segunda reunión fue pedida por Trapero a Forn la tarde del día 27 y se celebró en el Palau de la Generalitat el día 28. Además, de los asistentes en la del día 26, también estuvieron presentes el exvicepresidente Oriol Junqueras y los comisarios Manel Castellví y Emili Quevedo. La prefectura también pidió la presencia de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell para tratar del «cumplimiento de la legalidad». Forcadell, sin embargo, no asistió. «Visto que la voluntad del Govern era mantener la consulta y que teníamos el mandato de la magistrada de impedirla, a falta de dos días nos pareció que era un movimiento que no nos teníamos que ahorrar», ha asegurado.

En la reunión, López ha explicado que se pidió que atendieran su «petición» y del mandato judicial de «no llevar a cabo el referéndum», y que insistieron en mostrar su «seria preocupación» por el «clima de tensión general». «Los informes que teníamos todos tenían dos vectores, uno de alta movilización y otro de resistencia que en aquel momento todos entendíamos que era pasiva».

«Fácil incendio»

De hecho, ha asegurado que avisaron al Govern de que era «más que seguro que el 1-O habría incidentes». López ha remarcado que desconocían cuál sería su «naturaleza», pero que que era «evidente» que la situación era «crítica» por el «clima de tensión» y de «polarización de los dos bandos» que se estaba generando. «Había elementos altamente inestables que en contacto con otros el 1-O podían producir efectos contraproducentes», ha asegurado. López ha utilizado un símil con las condiciones que se tienen que dar para que haya riesgo forestal: «Alta temperatura, baja humedad y previsión de viento». «Era fácil que hubiera un incendio», ha concluido.

«Postura monolítica» por parte del Govern

La respuesta a estas advertencias hechas por Trapero y los otros tres comisarios fue, según ha declarado López, que el Govern tenía la «voluntad política» de llevar a cabo el referéndum porque tenían un «mandato», y que lo mantendrían todo sus «advertencias» y las órdenes judiciales.

El comisario ha relatado que Puigdemont, Junqueras y Forn tuvieron una «postura monolítica», porque «tenían un compromiso y lo querían llevar a cabo». Ha asegurado que Puigdemont dijo que, si se cumplían los escenarios previstos por los Mossos, «declararía la independencia», que no recordaba exactamente las palabras de Junqueras, pero que no había «divergencias» entre los tres, y que Forn tuvo «intervenciones breves».

López ha explicado que salieron de la reunión «convencidos» de que se iba directamente a un «escenario conflictivo», y que pudo constatar que había una «divergencia» entre el Govern y los Mossos, que se traban en una situación de «desampara gubernativa». En este sentido, ha asegurado que las reuniones que se celebraron el 26 y el 28 de septiembre «no tenían precedentes».

Reunión con Pérez de los Cobos

El comisario de los Mossos ha revelado una reunión con el coordinador del dispositivo policial el 1-O, Diego Pérez de los Cobos, el mismo día 28 por la noche. «Lo informo del contenido de la reunión, de los asistentes y de que se trata», ha explicado. El objetivo de este encuentro era dejar clara qué era la posición de los Mossos, de dar cumplimiento al mandato judicial, y evitar que pudiera haber «malentendido».

«Nunca colaboramos en la organización»

Durante la reunión, también se trasladó el mensaje que la policía catalana estaba al margen de la preparación u organización del referéndum, según López. «Los Mossos nunca colaboraron ni en la preparación ni en la organización ni en ningún acto previo del referéndum», ha remarcado. De hecho, ha recordado que cuatro ellos estaban en situación de «riesgo jurídico», porque el 7 de septiembre habían sido advertidos por el Tribunal Constitucional (TC).