Cataluña
La Guardia Civil entra en la Institució de las Lletres Catalanes por el caso de los contratos irregulares
La jueza quitó la investigación a los Mossos porque la exconsellera Borràs dijo que había hablado con el conseller Buch sobre el tema
La Guardia Civil entró el lunes en la sede de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC) con una orden judicial para recoger información en relación con unas presuntas contrataciones irregulares en la etapa en que la exconsellera de Cultura, Laura Borràs, dirigía la institución (2013-2016). Según publicó el Ara y ha confirmado la ACN, la policía entró por la mañana en la sede de la ILC y pasó unas dos horas por requerir varios expedientes. La actuación formaría parte del mismo caso de que trascendió en noviembre del año pasado. Entonces fueron los Mossos d'Esquadra quien requirieron documentación en la sede de la ILC, pero la jueza instructora los ha sacado recientemente la investigación después de que Borràs dijera en su momento que el conseller de Interior, Miquel Buch, lo había informado sobre un caso que se encuentra bajo secreto de sumario.
El mes de noviembre pasado los Mossos entraron en la ILC y en el Centre de Telecomunicacions i Tecnologies de la Informació en busca de documentación por orden del juzgado de instrucción número 9 de Barcelona.
La operación, nombradaAtenea, investiga la presunta contratación irregular para la reforma y la creación de páginas web oficiales a partir del posible fraccionamiento de los encargos para rebajar el coste y no tener que hacer concursos públicos.
La jueza que instruye el caso apartó hace unas semanas a los Mossos del caso y lo transfirió a la Guardia Civil. Todo deriva de las controvertidas explicaciones que Borràs dio en noviembre sobre como se había enterado de la investigación -que estaba bajo secreto de sumario-. Cuando se hizo pública la investigación, Borràs negó cualquier irregularidad y dijo que el conseller de Interior, Miquel Buch, le había negado que ella fuera investigada por los Mossos.
En la entrada de ayer en la ILC de la policía judicial, la Guardia Civil reiteró a los trabajadores y su director, Oriol Ponsatí-Murlà, que el caso se encuentra bajo secreto de sumario. Desde la Institució ofrecieron la «máxima colaboración» con la investigación, explican fuentes del departamento de Cultura a la ACN.
Después de que trascendiera la investigación judicial para aclarar si la ex consellera adjudicó contratos menores a dedo (se investigan en concreto al menos tres contratos relacionados con proyectos digitales por un valor total de más de 45.000, a una persona de su confianza), Borràs compareció en el Parlament para proclamar que las acusaciones son «rotundamente falsas» y que se trata de «difamaciones».