Naturaleza
La Xarxa de Rescat de Fauna Marina registra 150 encallamientos de animales
Hasta abril del 2019, los encallamientos de cetáceos se han reducido a sólo 5 ejemplares, y se han recuperado más de 60 tortugas marinas
La Xarxa de Rescat de Fauna Marina (XRFM) de la Generalitat de Catalunya ha registrado en el 2018 un total de 156 encallamientos de animales en la costa catalana, sobre todo tortugas y cetáceos. Eso supone once animales menos que el 2017, cuando se registraron 167 animales atascados: 129 tortugas y 38 cetáceos. La gran mayoría de los animales atascados en el 2018, un 71%, corresponde a la familia de las tortugas (Caretta caretta ), seguimiento del delfín rayado (Stenella coeruleoalba ), con un 30%, y otras clases de delfines, como el mular (Tursiops truncatu s), con un 6,4%.
Hasta abril del 2019, los encallamientos de cetáceos se han reducido a sólo 5 ejemplares, y se han recuperado más de 60 tortugas marinas. De los cetáceos atascados este año, hay que destacar el encallamiento de una ballena con pico de Cuvier, una especie rara de observar, que habría muerto por el impacto con una embarcación.
Éxito del rescate de tortugas
Las últimas cifras recogidas muestran, en el caso de las tortugas, que por primera vez se han recogido más ejemplares vivos que muertos. En concreto, el año 2018 se reportaron 110 ejemplares rescatados, de los cuales 70 estaban vivos y 40 de muertos. El porcentaje de supervivencia de las tortugas rescatadas vivas también ha registrado un incremento significativo, próximo al 97%, gracias al protocolo establecido a mediados de 2017 en colaboración con los pescadores de las cofradías de Sant Carles de la Ràpita, Alcanar y la Ampolla para facilitar la intervención inmediata en casos de capturas accidentales. El protocolo, que cuenta con el apoyo de los Agentes Rurales y la Fundación CRAM, se aplica de momento en el Delta de l'Ebre, donde se concentran la mayoría de capturas incidentales.
En el 2018, un total de 30 embarcaciones barcos recogieron 67 tortugas, y todas pudieron sobrevivir y volver en el mar pasados unos tres meses por término medio.
Este protocolo nace después de que, en los últimos años, la comunidad científica ha confirmado la afectación de la descompresión en tortugas de manera similar a los humanos. Así, al ser capturados a elevadas profundidades y subir rápidamente a la superficie, pueden sufrir un accidente que puede llegar a ser letal sin la atención clínica adecuada.
45 cetáceos atascados
Por otra parte, el segundo grupo más numeroso con respecto a encallamientos han sido los cetáceos. Concretamente, la red ha contabilizado 45 encallamientos, 40 de los cuales corresponden a animales ya muertos. La mayoría son delfines rayados (30 ejemplares), serie de 7 delfines no identificables, 6 delfines mulares y 2 rorcuales comunes (Balaenoptera physalus ).
El delfín rayado es la especie más abundante en nuestro mar territorial y es la especie que más atasca. Acostumbra a sufrir patologías internas que lo afectan y pueden causarle incluso la muerte. Es muy difícil que un cetáceo que llegue a atascar se pueda recuperar. Sólo algún caso de animales litorales, como el delfín mular, se acercan a puertos, bahías o calas de algunas partes del territorio para alimentarse hasta el punto de ser visibles desde la costa.
Finalmente, en el 2018 también atascó|encalló un tiburón peregrino (Cetorhinus maximus ), que llegó muerte a Roses en mayo del 2018.