La respuesta a la sentencia del Supremo, en la calle y en las instituciones
Torra quiere que el Parlament sea protagonista de la reacción al «torpedo» que supondría una resolución judicial condenatoria
Se va agotando la cuenta atrás para conocer la sentencia del Tribunal Supremo (TS) y se mantienen muchas incógnitas sobre cuál será la respuesta desde Cataluña. Lo que está claro es que habrá dos escenarios: la calle y las instituciones. Y que en este segundo ámbito, el Parlament jugará un papel protagonista. Así lo ha señalado el presidente de la Generalitat, Quim Torra, delante de lo que ha definido como «torpedo» a la convivencia si hay una sentencia condenatoria. La reacción más inmediata de Torra pero será dirigirse a los ciudadanos en uno mensajes institucional desde el Palau de la Generalitat. Con respecto a la calle, ANC y Òmnium ya han anunciado las movilizaciones de las ''Marxes per la Llibertat' que confluirán en Barcelona coincidiendo con una huelga general. Se mantiene la incógnita del papel que jugará el reciente nacido Tsunami Democràtic.
Hay diferentes vías para llevar la reacción de la sentencia al Parlament. El presidente Torra podría pedir a petición propia su comparecencia para fijar posición delante del escenario que se abre después de la decisión del Tribunal Supremo o también se podría pedir la convocatoria de un pleno específico. En este segundo caso, aparte del discurso de Torra ante de la cámara los diferentes grupos presentarían propuestas de resolución que se someterían a votación. Así pues, sería una manera a fin de que el Parlament se pronunciara ante la sentencia. Otra opción es que algún grupo presente una propuesta de resolución coincidiendo con la comparecencia de Torra.
Con respecto a los plazos, el criterio parlamentario es que tienen que pasar unas 48 horas para convocar un pleno pero el reglamento también prevé que la Mesa pueda acordar por mayoría acortar los plazos. Así pues, aunque no ha previsto ningún pleno ordinario previsto por la semana que viene, se podría acabar celebrando una sesión plenaria dependiendo de las peticiones que hagan al presidente Torra y los grupos parlamentarios.
En el debate de política general, el Parlament avaló la desobediencia civil e institucional y apostó por la amnistía, en una resolución aprobada por JxCat, ERC y la CUP. Es, de momento, el único acuerdo por escrito sobre la reacción a la sentencia mientras continúan los contactos para una estrategia conjunta. Todo en medio de las advertencias de diferentes partidos españoles, en un clima preelectoral, sobre la aplicación del 155 o de la ley de seguridad nacional.
ERC, en las últimas semanas, ha puesto sobre la mesa un gobierno de concentración, que ha sido descartado por los comunes, y unas elecciones en el Parlament. Esta segunda opción se ha ido desvaneciendo ya que el presidente Torra no lo ve con buenos ojos.
Por su parte, la CUP considera que lo más importante es la respuesta social y las movilizaciones en la calle. Y pone en un segundo plano la respuesta institucional a la sentencia.
Los comunes reclaman a los partidos independentistas que hagan una propuesta sobre cuál tiene que ser la respuesta institucional y consideran que la vía mes efectiva para sacar de la prisión a los líderes independentistas es una reforma del código penal que se aplique retroactivamente. Concretamente, proponen que se reformen los delitos de sedición y rebelión y que en el caso de rebelión se especifique que el uso de la violencia tiene que ser «con armas».
El PSC se limita a pedir que la reacción a la sentencia sea dentro de la ley y, de momento, no ve motivos para aplicar otro 155. Cs ya creen que se dan las circunstancias para volver a suspender el autogobierno de Cataluña y recriminan a Torra que pidiera desde el hemiciclo la libertad de los CDR detenidos investigados por terrorismo. En cambio, el PP que había apostado para el 155 apuesta ahora por priorizar la aplicación de la ley de seguridad nacional para controlar a los Mossos desde el gobierno del Estado.
Marchas porla libertad y la incógnita de Tsunami Democràtic
Las dos principales entidades soberanistas, ANC y Òmnium, lideran las movilizaciones en la calle como respuesta a la sentencia. Han preparado cinco marchas a pie desde diferentes puntos de Cataluña que recorrerán en tres días hasta confluir en Barcelona. Se harán el miércoles, jueves y viernes después de hacerse pública la sentencia. Este último día coincidirá la llegada a la capital catalana con la huelga general convocada por la Intersindical-CSC. Está previsto que las marchas arranquen desde Girona, Vic, Berga, Tàrrega y Tarragona y que se recorran a pie 100 kilómetros. Por otra parte, el mismo día que TS haga pública la sentencia, la ANC y Òmnium convocarán concentraciones a las 20 horas en diferentes puntos del país.
Los CDR han dado apoyo a las movilizaciones de la ANC y Òmnium y no han anunciado, de momento, actuaciones propias en un contexto en que siete miembros de esta organización están en prisión preventiva investigadas por terrorismo. En las últimas horas, los coordinadores de los CDR se han expresado por primera vez a través de entrevistas en medios de comunicación para dejar claro que «nunca» avalarían acciones como las que se atribuyen a los siete encarcelados.
Y desde Tsunami Democràtic, esta plataforma anónima, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos a dejar lo que estén haciendo cuando se haga pública la sentencia. Sin explicar los detalles, aseguran que la respuesta que está preparada «requiere una reacción inmediata» pero que no será sólo una acción de un día. Para esta movilización inmediata Tsunami Democràtic pide a la gente que lleve una radio, calzado cómodo y comida y agua para pasar el día fuera de casa. Y en caso de vivir fuera de Barcelona, avisan de que se tiene que estar preparado para coger el coche o el transporte público.
Con respecto a los estudiantes, el Sindicat d'Estudiants ha convocado huelga a institutos y universidades el 16, 17 y 18 de octubre, asimismo, también ha instado a parar las clases en el momento que se conozca la resolución judicial.